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Explicó que dentro de la Ley de Administración Financiera se establecen ciertos lineamientos para elaborar el presupuesto y que un mandato dentro de esa normativa es mantener la metodología de cálculo del presupuesto en lo que se refiere a los gastos corrientes que necesariamente debe ser contenido.
Se puede incorporar un ajuste o hacer recortes, pero tiene que mantenerse cierta estructura presupuestaria. Se puede hacer una recomposición del presupuesto, pero manteniendo cierta línea, lo que se llama el gasto rígido, indicó Correa.
Cuando se habla de responsabilidad fiscal, más allá de cuál sea el instrumento para eso, se determina que los ingresos deben tener un sustento técnico, en primer lugar, y una de las cuestiones que se están planteando es que eso nazca del Ministerio de Hacienda, señaló el funcionario.
Recordó que actualmente existe en el Congreso una gran cantidad de proyectos de ley que están vinculados con generar nuevos gastos. Y eso, de alguna manera, no tiene ningún tipo de sustento técnico, desde el punto de vista de los ingresos. Cuando sean aprobados, necesariamente deben ser incorporados dentro del presupuesto general de gastos porque la Ley de Administración Financiera también obliga a que ese tipo de gastos deban ser incluidos.
Por eso, generalmente el Ministerio de Hacienda se ve obligado a generar un nuevo gasto corriente, en este caso, dada la metodología que se tiene para el cálculo.
Topes
Dentro de la Ley de Administración Financiera hay algunos topes que tiene el Congreso a la hora de estudiar el presupuesto, pero nunca se debatió. Correa puso como ejemplo el hecho de que a la hora del estudio del presupuesto, se tiene que hacer un determinado tipo de decisión y los gastos no pueden ser tocados, solo podrán ser modificados los gastos de inversión. Entonces, hay ya algunas leyes que determinan el comportamiento o la metodología del tratamiento del presupuesto. De hecho, la misma Ley de presupuesto, las leyes anuales, establecen ciertas condiciones. Y de alguna manera, lo que se quiere plantear con este proyecto de ley es mostrar alguna señal de responsabilidad y de disciplina fiscal hacia los agentes económicos.