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El exministro realizó declaraciones al respecto a Carlos Peralta, de la emisora 780 AM, diciendo que “normalmente en los cargos de confianza se elige a personas conocidas por su idoneidad y cercanía familiar o amistosa. Pero aclaro que estoy en desacuerdo con que la función pública sirva para meter a toda la parentela o a los amigos del valle o zona”, dijo. Sin embargo, admitió al mismo tiempo que unos 15 funcionarios ingresaron al MIC durante su gestión y que son “amigos” de su departamento.
Solicitó además “pruebas” que acrediten que postulantes del departamento de Cordillera, del que es oriundo, hayan sido privilegiados en el proceso de selección publicado este martes por nuestro diario, con base en el Exp. Secretaría de la Función Pública (SFP) N° 42/12, realizado por un joven afectado por haber sido desplazado en un concurso llamado por el MIC, a pesar de haber realizado uno de los puntajes más altos en una competencia pública de oposición, méritos y aptitudes, para cubrir vacancias en la Unidad Técnica Especializada.
En noviembre de 2011 el denunciante Mario César Vargas Peralta participó del examen, logrando 96 puntos de un total de 100 y sin embargo no accedió al cargo en concurso, no así varios amigos del ministro oriundos de su “valle”, muchos de los cuales registraron menores puntajes que él y que incluso figuraban ausentes en las planillas respectivas.
Apenas hizo 35 puntos
Rivas mintió ayer al señalar que “todos” los que han obtenido buen puntaje fueron nombrados ya que entre los admitidos se observa el caso de Ángel Morel, que apenas alcanzó 35 de 100 puntos, o peor aún de Ever Segovia, quien ni siquiera rindió, pero igual fue contratado.
De acuerdo a la SFP, los admitidos debieron figurar en el rango de puntos de 89,5 a 98. Sin embargo, en la planilla aparecen contratados por el MIC con 80 puntos como Fabio Coronel, María Álvarez con 80,5; Ingrid Goiburú con 82 puntos y con 81, José Ríos.
En la lista de confirmados en el irregular concurso de oposición aparecen Jorge Aguayo con 84 puntos, Jéssica Coronel con 86,5 y Fanny López con el mismo puntaje, entre varios otros, y sin embargo al que logró 96 puntos no lo nombraron en el MIC.
Descalifica concurso
El extitular del MIC no solo reconoció que benefició a sus compueblanos sin concurso, sino que incluso descalificó las competencias de este tipo sosteniendo que el examen de admisión “no lo es todo” y que también son importantes “el aspecto y facilidad de palabras de cada persona”. Si consideramos las mismas expresiones de Rivas, él mismo jamás hubiera accedido al cargo de ministro, porque le resulta muy difícil hilar frases seguidas sin tragarse alguna letra, y manifiesta normalmente graves inconvenientes de sintaxis.
Lo peor de todo en nuestro país es la grave impunidad reinante, porque este caso fue de conocimiento de todos los órganos de control, como la Contraloría General (ver facsímil), y a pesar de todo nada se hizo al respecto para salvar la penosa irregularidad.