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CIUDAD DEL ESTE (Mariana Ladaga, de nuestra redacción regional). La intención es que las políticas económicas sean más duraderas y esto permita estabilidad y competitividad a las zonas fronterizas. Los informes indican que la reunión tuvo lugar el último fin de semana en las oficinas de Mega Shopping, en el microcentro local. Participaron empresarios de las zonas que limitan con Brasil y donde más del 80% del movimiento comercial se basa en la venta de artículos importados a turistas y compristas provenientes del vecino país.
Los empresarios establecieron alianzas para plantear todos juntos al Gobierno nacional modificaciones que consideran que serán importantes para mantener competitivo al comercio de turismo. Esto ante los recientes cambios en las políticas tributarias de los países vecinos. Desde el mes pasado, en Argentina los electrónicos importados tienen arancel cero y en Brasil avanza el proyecto de implementación de áreas de venta libres de impuestos en la frontera.
El vicepresidente segundo de la Cámara de Comercio de Ciudad del Este, Said Taijen, explicó que buscan que la normativa del régimen de turismo se establezca por ley y ya no por decretos, como ocurre hoy.
La vigencia de una ley permitiría que las políticas económicas que rigen el comercio fronterizo sean más duraderas. Esa estabilidad a su vez haría más competitivo al sector ante las tiendas de Brasil y ayudaría a la formalización del movimiento comercial, según Taijen.
“Estamos buscando siempre ser competitivos ante nuestros vecinos y eso nos ayudaría a ganar competencia y adentrarnos en el proceso de formalización del país y de toda la frontera. La modificación de una ley es más complicada, se necesita otra ley, entonces tendríamos una cierta estabilidad en la economía”, indicó el comerciante. Agregó que están conversando con varios diputados para que estos acompañen su intención.
Paralelamente, las cámaras de comerciantes están en tratativas con el Ministerio de Hacienda para que se introduzcan modificaciones en lo que regirá desde el 1 de abril, que consideran que lejos de beneficiar al comercio fronterizo, les hará perder competitividad y podría, en vez de formalizar la economía, alentar la coima en las importaciones.