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No sabíamos de esta nueva medida, pero es obvio que nosotros, los productores, también tenemos que hacer algo ante esta situación”, aseguró ayer el presidente de la Cámara, Siro González, cuando fue consultado sobre la posición de su gremio ante la determinación del Senave de habilitar de nuevo la emisión de la Acreditación Fitosanitaria (Afidi) para la importación por vía fluvial de productos vegetales de origen argentino.
González agregó que es una lástima que el Senave haya resuelto eso, porque el ingreso por vía fluvial de frutihortícolas facilita la entrada ilegal de productos argentinos, explicó.
Refirió que durante las semanas que no emitieron las Afidis para el sector fluvial pudo comprobarse que mermó el contrabando, ya que todas las cargas permitidas llegaban por tierra, hecho que posibilita el control de los productos por parte de la Aduana.
“Con esto se fomenta el contrabando, porque no hay forma de controlar el río y hay muchos puertos clandestinos. Esto, lastimosamente, nos toma de sorpresa, pero justo tenemos programada una reunión con los demás productores para este lunes, en la que hablaremos sobre este asunto y, por supuesto, algo vamos a tener que hacer” dijo González.
Añadió que así como los paseros y trabajadores de frontera son atendidos en sus reclamos, las autoridades también tienen la obligación de escuchar el reclamo de los productores nacionales. “Vamos a tener que tomar algunas medidas”, afirmó el gremialista.
El Senave suspendió la entrega de Afidi hace una semana luego de constatar que varios Códigos Únicos de Validación Electrónica (Cuve) de los certificados fitosanitarios que presentaban los importadores no eran reconocidos por la web del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina, entidad que emitía esos certificados. Esto hacía suponer que los documentos eran falsificados, ya que la situación se presentó solo con las cargas que llegaban al país por vía fluvial, por lo que el Senave suspendió la entrega de los documentos.
El Senave corrigió su postura el jueves último tras una reunión con representantes del Senasa argentino y comerciantes de Clorinda.