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“Cuanto más aumenten los impuestos al sector agrícola, habrá más pequeños y medianos productores sin futuro que se convertirán en una carga social más para el gobierno. Poco más del 50% de los productores de Itapúa son pequeños y medianos con menos de 50 hectáreas. El Estado debería hacer un sondeo de la situación económica de estos”, manifestó Orlando Gallas, gerente de la Cooperativa Colonias Unidas.
Recalcó que de llegar a aplicarse medidas de reajuste de impuestos, los más golpeados en el futuro serán, indudablemente, los pequeños y medianos productores del país.
Por su parte, el dirigente de la Coordinadora Agrícola de Caaguazú, Hermes Aquino, afirmó que la solución no es aumentar el aporte tributario, sino que el Estado administre mejor el dinero público.
“El problema no es la plata, sino que nuestros políticos y funcionarios del Gobierno mal administran el dinero que aportamos todos los paraguayos”, expresó.
Indicó que la intención del nuevo gobierno es seguir cargando las deudas sobre los hombros de la gente que aporta, y el dinero, al final, “va a parar a niñeras de oro, clientelismo político, etc.”.
Mencionó que los precios de los commodities están “por el suelo” y es posible que no cierren los números, cosa que mantiene a los productores paraguayos más preocupados y en alerta ante una posible suba de impuestos.
El incremento del impuesto solo es una posibilidad, había dicho Benigno López, quien sería el futuro ministro de Hacienda en el gobierno de Mario Abdo Benítez, que asumirá la conducción del país el próximo 15 de agosto.