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Puso como ejemplo el asentamiento Nueva Mestre, donde se crearon tres núcleos habitacionales, pero sus actuales propietarios aún no tienen el título de propiedad. Esta comunidad, ubicada en el departamento de Presidente Hayes, comenzó a construirse en 1993, con un primer núcleo de 50 viviendas, más local comunitario y un tajamar. Surgió como una solución y una respuesta a las familias campesinas sin tierra que vivían en precarios campamentos a la vera de la ruta Transchaco, entre los Km 134 y 218. Allí fueron asentadas personas que se dedicaban a la venta de productos de caza y de eventuales changas. Carecían de los servicios básicos y de una vivienda propia.
Esta obra surgió a iniciativa del entonces obispo de Benjamín Aceval, Mario Melanio Medina, quien buscó ayuda internacional y fue así que contactó con la Asociación Solidaridad para el Desarrollo, que a su vez obtuvo fondos no reembolsables. El Gobierno, a través del entonces IBR, gestionó las tierras: unas 20.000 hectáreas, donde fueron asentados los nuevos pobladores. Aquí se construyeron otros núcleos que hoy albergan a 150 familias.
La asociación invirtió en este proyecto 2.500.000 euros, además se introdujeron otras mejoras como la construcción de tajamares, instalación de luz y otros servicios básicos.
Bellini dijo que cuando se presentó el proyecto, el gobierno de Wasmosy se había comprometido a titular las tierras y transferirlas, pero hasta hoy los beneficiarios aún no tienen el título.