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La ruta se extiende en forma paralela al río Pilcomayo y conduce a las demás localidades del departamento, como Gral. José M. Bruguez, Tte. Esteban Martínez y Tte. 1° Manuel Irala Fernández. La comunidad tiene una población de 5.000 habitantes.
Artemio Arrúa, poblador de la zona, dijo que la ruta se encuentra intransitable, pues fue asfaltada en el año 1982, pero hasta la fecha no se realizó ningún tipo de mantenimiento a dicha capa asfáltica.
Agregó que el trabajo del MOPC se limita a “raspajes” en la ruta, fórmula que empeora la situación de la misma en los días de lluvia, dejando a las poblaciones que dependen de este camino sin posibilidades de salir de la zona.
En los días de sequía, deben aguantar como pueden la polvareda que levantan los camiones de gran porte, que circulan con mucha velocidad por la zona, lo que vuelve incluso peligrosa la vía.
En los días de lluvias, estos camiones dejan profundas huellas a lo largo de su trayecto, quedando el camino casi impracticable, explicó Arrúa.
Esta ruta conduce a zonas ganaderas del departamento, por lo que no se puede evitar la circulación de vehículos pesados, pese a que la destruyen y dejan pérdidas económicas para otros sectores.