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El ingeniero Juan José Encina, titular del Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE-Paraguay), dijo que el Pliego de Tarifas debe dar una señal de lo que el país necesita para el uso de la energía eléctrica a futuro, ya sea el desarrollo industrial, el apoyo social, la restricción o incentivo del uso de la energía en determinados horarios, el fomento de las instalaciones industriales de empleo intensivo, evitar factores de potencia bajos en instalaciones en media tensión, entre otros.
Explicó que como resultado de esa evaluación país son la tarifa social, las tarifas diferenciales en media tensión, recargo por los excesos de potencia, el recargo por factor de potencia inferior a 0,92 en instalaciones en media tensión, etc.
Según el Art. 92, de la Ley 966 de la ANDE, establece que el Pliego de Tarifas es el documento oficial sobre el cual se realiza la facturación de los más de 1.500.000 consumidores de la ANDE, y debe cumplir todo lo indicado en dicha ley. “Al aplicar las tarifas no podrán discriminarse entre consumidores de naturaleza similar, clasificables en un mismo grupo de acuerdo con el pliego vigente”, dijo.
Recordó que, sin embargo, como resultado del déficit financiero y la rentabilidad negativa de los años 2015 y 2016, que tuvo su origen en la inadecuada contratación de potencia que elevaron los gastos de explotación en forma inusitada, en marzo de 2017 se incrementaron las tarifas eléctricas a través del Pliego N° 21, y en un momento en que la “gestión ineficiente” de sus autoridades no tienen respuesta a los cortes de cada verano y las personas al frente de la ANDE son las mismas desde hace varias décadas.
Cesión de energía
Encina señaló asimismo que el haber incrementado la tarifa, en un país con capacidad disponible de generación hasta el 2033, castigando el consumo, “es una señal” de que lo que se busca es frenar el crecimiento de la demanda máxima, que se duplica cada década, y continuar cediendo energía de las binacionales a los países vecinos.
Añadió que el caso de la Compañía Luz y Fuerza SA (Clyfsa), que fue beneficiada judicialmente contra el aumento de tarifas de ANDE, constituye “un agravante” del caso. Dijo que esta empresa, que redistribuye la energía del ente estatal a la parte céntrica de la ciudad de Villarrica, con 14.000 consumidores, evitó que la ANDE recaude más de US$ 3.000.000, pero principalmente ha establecido una discriminación adicional para el resto de sus consumidores, que también transgrede lo establecido en la Carta Orgánica de la empresa pública, al discriminar consumidores de un mismo grupo de consumo.
Ante esta situación, el Ing. Encina afirmó que “es claro” que se deben modificar las tarifas, pero antes de pretender “redescubrir la pólvora” con intentos de aplicar tarifas horarias a clientes en baja tensión (que solo sería aplicable en dos años) o imitar modelos del ámbito privado; se debe tener bien claro que primero hay que cumplir las leyes, principalmente la carta orgánica de ANDE, y en segundo lugar establecer el objetivo de largo plazo para el consumo de energía eléctrica a nivel país. “Claramente el Pliego de Tarifas N° 21 fue mal concebido y ha traído más complicaciones que beneficios; por lo que resulta urgente su cambio, y así como se reclama una tarifa justa por nuestra energía cedida a otros países, debemos comenzar primero con que sea justa para todos los consumidores paraguayos”, enfatizó.