Cargando...
“Creo que se trata de un acontecimiento esencial para el objetivo de nuestro país, de procurar que esas valiosas aguas sean compartidas en partes iguales, para que terminen definitivamente los problemas cíclicos producidos por la escasez de líquido en la cuenca del río”, dijo, según informe de la ARP.
Recalcó que la apertura del cauce hídrico es un hecho plausible y estratégico para las pretensiones de nuestro país. Valoró la decisión del gobierno del vecino país de interesarse por la situación de Paraguay y no poner ningún tipo de traba para la construcción de una segunda desembocadura.
Según los datos, la segunda embocadura estará ubicada a unos 5 kilómetros, aguas abajo, de la entrada de agua actual ubicada en la zona denominada “pantalón”, por la forma que tomaron los cauces en el sitio.
“Ahora solo falta que nuestro gobierno se ponga las pilas y, en consonancia con nuestra preocupación, ordene el inicio inmediato de las obras, que tienen que hacerse luego de que se apruebe el presupuesto correspondiente”, recalcó Eusebio Manuel Cardozo.
Ayer intentamos comunicarnos con el ingeniero Óscar Salazar, de la Comisión Nacional del Pilcomayo, para conocer detalles del anuncio dado por el directivo de la ARP. Llamamos a su línea celular, con terminación 147, le dejamos un mensaje, pero no contestó.
Finalmente, Cardozo abogó porque no se repita la mala experiencia y se asegure el acceso permanente de agua a nuestro territorio.