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Mencionó que durante su gestión como contralor, ha realizado negociaciones con sus pares de Argentina y Brasil respectivamente, para la realización de controles conjuntos o alternativos a las entidades binacionales. “Tuvimos un paréntesis con Yacyretá con la promesa del Ing. Sarubbi para saber exactamente cuál era la cuantía de la deuda y con esa promesa nos fuimos a Buenos Aires, y el encargado de la oficina de la EBY en Argentina apenas nos permitió acceder a un 8 por ciento de toda la documentación”, lamentó Airaldi. Agregó que el cien por ciento de las documentaciones de Yacyretá están en Buenos Aires.
Por otro lado, observó que el tratado contempla la realización de auditorías externas e internas y aclaró que las auditorías que realiza la Sindicatura como la Auditoría de la Nación Argentina son “meramente observación de balances y no son auditorías” y por ese “trabajito” cobran sumas muy importantes, afirmó. Por eso puso en duda esos resultados y exigió que se realicen auditorías “reales”, porque solo así el pueblo paraguayo podrá estar confiado de que el dinero que le pertenece a cada una de las partes se utiliza de forma debida.
“Fueron a patotear”
El Ing. Paul Sarubbi intervino y justificó que los documentos de la EBY se encuentren en la capital argentina, ya que ahí funciona la sede oficial de la entidad. Negó que se hayan resistido a entregar los datos al equipo de la CGR. Aseguró que “es falso y es mentira cuando dice que solo se le entregó el 8 por ciento”, porque esa fue solo una parte de los miles de documentos. Afirmó que hubo roces con los argentinos debido a que los funcionarios de la Contraloría se “fueron a patotear” en la EBY en vez de tomar con seriedad su trabajo.