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Petróleos Paraguayos (Petropar) no ha respetado la disposición de las leyes de Presupuesto 2016, 2017 y 2018 que obligan a las entidades públicas a depositar sus fondos en el Banco Nacional de Fomento (BNF) y, en bancos privados, solo cuando van a pagar a alguna proveedora internacional.
Planillas que datan de entre 2015 y 2018 a las que accedió nuestro diario revelan que Petropar ha mantenido millonarios depósitos a la vista, en guaraníes y en dólares, en varios bancos privados. Por ejemplo, los últimos años tenía depositados en el Citibank alrededor de G. 10.000 millones. La mitad de ese dinero estaba (y sigue estando) a plazo fijo a un interés del 4,7%. En este mismo banco Petropar mantenía en 2015 la suma de US$ 6,3 millones a la vista; en Sudameris, US$ 4,2 millones; en Itaú, US$ 13 millones; y en el BBVA, US$ 15,4 millones. Montos que aún se mantienen.
En 2015 el BNF tenía apenas dos cuentas corrientes de Petropar con montos que oscilaban entre US$ 17.000 y los US$ 2 millones; en 2016 y 2017 los ahorros en dólares de la estatal subieron a US$ 90 millones y en guaraníes fluctuaban entre 4.000 millones y 40.000 millones.
La entidad bancaria con menos dinero de Petropar en ese periodo era Atlas, con US$ 39.000. GNB mantenía depósitos entre US$ 601.000 y US$ 2 millones.
La nueva presidenta de Petropar, Patricia Samudio, fue cuestionada por algunos sindicalistas por haber transferido unos US$ 40 millones del Citibank, Itaú, BBVA y Sudameris a los bancos GNB y BASA (ex Amambay), del Grupo Cartes. Incluso, el diputado Édgar Acosta solicitó esta semana informes sobre dicha operación.
Al respecto, Samudio argumentó que dio su visto bueno a la transferencia porque los entonces gerentes Luis Gómez (de finanzas) y William Wilka (general) le dijeron que “era normal” pues el BNF no tiene la tecnología necesaria para ciertas operaciones.
De hecho, el propio titular del BNF, Daniel Correa, reconoció el miércoles último a la prensa que la banca pública sigue con limitaciones para algunas transacciones, razón por la cual todavía hay entes estatales que no han podido transferir la totalidad de sus fondos al BNF.