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Sin embargo, hasta la fecha los lugareños padecen el pésimo estado del tramo caminero. La situación se agrava en los días de lluvias, ya que circular por el trayecto es prácticamente imposible si es que no se cuenta con vehículos 4x4, o se deben recurrir a tractores para cruzar el lodo.
En muchos casos, los transeúntes deben caminar más de ocho kilómetros por el fango para llegar a sus lugares de trabajo o estudio. Los vecinos responsabilizan de la situación al Gobierno nacional y a los administradores de la EBY.
En setiembre de 2014, Yacyretá suscribió un contrato por G. 12.186, millones con el “Consorcio LG”, representado por los ingenieros Luis López y Carlos Gueyraud, para la construcción de 12 km de empedrado entre el distrito de Ayolas-Corateî. El documento establece que los trabajos debían concluir en un plazo de 360 días. Sin embargo, a la fecha, con siete meses de retraso, el trabajo no supera cinco kilómetros.
En mayo de 2015, la EBY destinó G. 30.479 millones al “Consorcio Laureles”, representado por el Ing. Óscar Antonio Rubiani, para la construcción de 19,2 km de empedrado desde desvío Corateî hasta Yabebyry, con plazo de 720 días.
Al respecto, la gerenta del Plan de Terminación de Yacyretá (PTY), Ing. Susana Giménez, señaló que realizaron la observación correspondiente a la empresa LG por demorar los trabajos, “teniendo en cuenta la modificación que se hizo en el proyecto inicial, ya que en parte del tramo Ayolas-Corateî las aguas sobrepasaban la calzada”. Giménez agregó que emplazaron a la contratista para que acelere el ritmo del trabajo con el objetivo de que cumpla con su cronograma. “Aun habiendo días de lluvia, hay días en los que sí se puede trabajar en la zona de obra”, dijo.