Cargando...
Hay que tener en cuenta que tampoco agentes de la Policía Municipal de Tránsito (PMT) ni de la Patrulla Caminera ayudan en la zona en que están los desvíos por las obras de duplicación de la citada vía, que por ahora se reduce al recapado asfáltico del carril que corresponde al sentido este-oeste, es decir, del que lleva hacia la Capital.
Ese sector permanece cerrado en un tramo de casi dos kilómetros, y el desvío es por uno de los carriles del sentido Capital-interior, donde las divisorias de plástico se mueven fácilmente, y en otros lugares ni siquiera existen.
Además, la iluminación en el lugar es escasa, por lo que a la noche es como tierra de nadie. Algunos choferes incluso bajan y colocan bien las divisorias para poder continuar sin mayores riesgos. Por otro lado, el nuevo asfaltado aún no cuenta con las líneas correspondientes de división de los carriles, a pesar de que fue habilitada hace ya dos semanas.
El tránsito se torna lento en la zona, y los automovilistas deben circular con cuidado. Los conductores pueden utilizar como camino alternativo, desde Itauguá hasta Ypacaraí, una vía que une ambas ciudades y es paralela a la Ruta II.
En el marco del proyecto de duplicación de la Ruta II, se realizan las mejoras en el tramo 0 (San Lorenzo-Itauguá), consistentes en mejorar 12 intersecciones para los giros a la izquierda, de los cuales cinco pertenecen al distrito de Itauguá. Específicamente, se encuentran demoliendo los muros de cemento del medio para crear un carril a ser utilizado para los giros a la izquierda. Esas obras continuarán hasta San Lorenzo, progresivamente.