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Aunque la hoy presidenta interina de Petropar Catherine V. Vargas haya negado en sucesivas ocasiones su vinculación con la licitación sobrefacturada (en más del 100%) de garrafas, causal de la remoción de su predecesor en el cargo, por el propio presidente Cartes, documentos a los que accedimos revelan que efectivamente participó, y desde el inicio mismo del proceso. No solo en su carácter de gerente general y como integrante del equipo del titular saliente Rómulo Alfredo Campos Krauer, sino que también cuando quedó encargada de despacho de la presidencia de Petropar.
Justamente, el 25 de noviembre último, cuando empezó el proceso para la compra de las garrafas sobrefacturadas, y estando encargada de despacho en Petropar, solicitó al Ministerio de Industria y Comercio (MIC) incumplir la Norma Paraguaya N° 10 (NPA N° 10), en el Art. 1, y que le aprueben las especificaciones técnicas elaboradas por técnicos de Petropar para la licitación pública internacional para la adquisición de garrafas (ver facsímil). Adjuntó un dossier de todo lo que conformaría el cuestionado proceso, incluyendo dibujos de los cilindros y especificaciones de todos los envases que iban a adquirir, entre otros puntos.
“De interés nacional”
Vargas no solo participó directamente del proceso de compra, sino lo calificó de “interés nacional del Gobierno”, en la nota remitida al MIC. Dijo: “Esta licitación es de interés nacional y cumplirá un rol social del Gobierno paraguayo, por estar destinada a la provisión de garrafas a precios accesibles a las familias más carenciadas de nuestro país”. Contrariamente a sus palabras, lo que se descubrió fue un intento de sobrefacturación, en más de 100% de la cotización de mercado. Lo más irónico de todo es que varias fraccionadoras locales importaron de la misma proveedora tailandesa a precios significativamente inferiores de lo que pagaría Petropar.
Mintieron Vargas, Cañete y el ministro Leite
No solo mintió Vargas al señalar que “no tuvo participación directa en la licitación”, sino también su principal defensor, el asesor del presidente Cartes, Carlos Cañete, quien aseguró que Vargas no formó parte de la cuestionada licitación, y también mintió el ministro Gustavo Leite al defenderla.