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Se trata de dos proyectos, uno de 40 viviendas ya entregadas, y otro de 35 casas sin culminar y con un faltante de G. 2.400 millones, según los socios. Responsabilizan al ahora expresidente de Covitava, Aldo Pereira, quien niega las acusaciones en su contra.
Tras una intervención del Instituto Nacional de Cooperativismo (Incoop), se decidió la liquidación y se integró una Comisión Liquidadora que debía finiquitar los trámites con la Senavitat y presentar un plan de pagos, que hasta el momento no se hizo por los desacuerdos.
Consultada sobre el tema, Bernarda Pereira, tesorera de la comisión liquidadora, expresó que aún no firmaron el documento referido al plan de pagos porque no hay acuerdo sobre varios puntos y que quieren encontrar otra opción que no sea la dación (deben transferir las propiedades a la Senavitat). “Estamos de acuerdo con la dación en pago del proyecto 1, pero no del 2, porque tiene varios problemas y ahora también invasión”, alegó.
Por su parte, un grupo de socios afectados manifestaron que quienes se oponen al documento quieren plantearle a la Senavitat que intervenga de alguna forma para ayudar a la reactivación de la cooperativa, aunque también creen que “lo mejor sería que la Senavitat administre sus proyectos sin intermediarios”.
Por otra parte, denunciaron que hay invasiones en ambos proyectos. En el proyecto 1, una familia pidió la intervención fiscal para el desalojo de los invasores, pero eso no ha ocurrido.