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La delicada situación por la que atraviesan las citadas instituciones fue abordada por el arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela, quien al término de la última misa crismal que celebró en la Catedral Metropolitana dijo que la jerarquía de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) ya tomó contacto con el Ministerio de Agricultura y Ganadería y ahora se aprestan a ir también al Ministerio de Hacienda para intentar recuperar el aporte estatal para el funcionamiento de las 19 escuelas agrícolas que están bajo administración eclesial en diversos puntos del país.
“Han recortado 70% del presupuesto de las escuelas agrícolas y oportunamente pediremos al presidente Cartes que reconsidere los cortes para que el combate a la pobreza que se hace a través de la educación agrícola de los campesinos se corresponda con la idea que se está queriendo implantar, es decir combatir la pobreza con educación y con la educación agrícola”, indicó.
De ocurrir lo contrario, según Valenzuela, “lamentablemente tendremos que cerrar estas escuelas y estos niños y jóvenes clamarán justicia porque no se les da la educación que corresponde, como la agrícola”. La escuela agrícola Carlos Pfannl, ubicada en Cnel. Oviedo, es una de las que cerraría sus puertas. Allí estudian más de 300 jóvenes.
En Ñu Apu’a, Alto Paraguay, está la única escuela agrícola del Chaco con 150 niños y adolescentes que estudian para tener otra alternativa a la ganadería. “Están aprendiendo la agricultura para que el chaqueño aproveche su tierra, una tierra abundante cuando llueve, una tierra que produce todo lo que se siembra, entonces es falta de conocimiento de lo que se está haciendo en el Chaco, que es un pequeño esfuerzo para que ellos no sean solo ganaderos, sino también agricultores”, dijo finalmente el arzobispo.