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“En el caso de Itaipú hay empresarios que quisieron importar directamente energía de Acaray y el Gobierno brasileño no les permitió porque eso hubiera implicado que Paraguay retire más energía de Itaipú, por lo tanto iría menos energía al Brasil”, explicó.
Lo mismo ocurre con la Argentina, porque por más que se esté construyendo la línea 500 kV no cree que los argentinos permitan que se saque más energía de lo que pueda utilizar nuestro país.
“La Argentina no nos paga el precio que corresponde por utilizar nuestra energía. A diario se está viendo en el informe del sector de operaciones que Paraguay solo utiliza del 7, 8 o máximo hasta el 10% de lo que produce Yacyretá y más del 90% va al lado argentino. Es más, ellos se permiten el derecho de exportar nuestra energía al Brasil con la anuencia de nuestras autoridades, bajo la figura de “intercambio”, agregó.
Añadió que en Brasil hay una política clara de obstaculizar la exportación de la energía paraguaya, no solo de Itaipú sino también de Acaray. “...Nos traban, una vez hubo intención de Uruguay de importar energía del Paraguay, y Argentina prohibió el paso de la línea de transmisión por su territorio”, recordó.