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Como ya es una tradición dentro de la expoferia, Chortitzer realizó ayer su desayuno de encuentro con los amigos. En la ocasión, Trébol presentó su stand, que en esta oportunidad cuenta con una temática dedicada a la vida sana.
Gustav Sawatzky habló como presidente de la cooperativa, recordando la historia de trabajo y sacrificio que llevó a los primeros impulsores de la entidad para crear esta industria, que cada año se fortalece y genera miles de empleo.
Hizo hincapié en la difícil situación económica de gran parte de la población paraguaya y añadió que cooperativas como Chortitzer vienen trabajando desde hace años para generar mayores oportunidades y mejorar el nivel de vida de muchas familias paraguayas. Unas 50.000 familias dependen laboralmente de las cooperativas de producción, acotó.
Destacó que se debe trabajar en forma urgente en incluir a pequeños productores en la cadena de producción alta, para que puedan ir logrando un mejor nivel de vida.
En ese sentido, acotó que lo mejor que se puede hacer es invertir en tecnología y el apoyo técnico para los pequeños productores.
Subsidio genera pobres
“No podemos seguir con el subsidio. El subsidio es igual a pobreza, es seguir con la dependencia. Tenemos que hacer que los más pequeños puedan independizarse económicamente del Estado”, enfatizó.
Indicó que no se puede pedir paz social en el país si hay gente con hambre. “No existe paz social con el estómago vacío”, dijo contundente, y finalizó su discurso diciendo que las cooperativas con una administración transparente y legal son un instrumento muy importante en Paraguay para que miles de personas puedan tener su mejor nivel de vida.