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El hecho de que este año la ANDE solo esté retirando un 5% de la producción de la central hidroeléctrica Yacyretá, por supuestas razones económicas o de tarifas, no es del todo convincente, sobre todo teniendo en cuenta que hasta antes de la firma del Acta de Entendimiento, la empresa estatal venía pagando unos 22,6 dólares por megawatt/hora (US$/MWh), señaló el Ing. Axel Benítez, exdirector de Energía del Viceministerio de Minas y Energía.
“La razón de traer más o menos energía de la EBY debería ser por una cuestión estratégica, nunca operativa”, añadió.
Además puso en duda que la decisión de contratar menos se deba a un plan de “optimización”, como lo declaró el gerente técnico de la empresa, Ing. Walter Causarano, puesto que en los últimos años, ocurrió todo lo contrario, ya que subieron los costos de la energía adquirida de la usina de Itaipú. “Esto se nota, por eso será que para la ANDE la tarifa media anual, producto de su “optimización” ha aumentado de unos 28 US$/MWh en el 2012 a 32,8 US$/MWh en el 2016, o sea, casi un 20% más”, explicó.
Por su parte, el ingeniero Juan José Encina, secretario de la Asociación de Ingenieros del Sector Eléctrico (Aisep), también se refirió al tema y señaló que, finalmente, después de las denuncias de mala contratación de las condiciones de suministro de Itaipú, que produjo una rentabilidad negativa en 2015 y 2016; ahora reconocen que ANDE contrató inadecuadamente y han corregido para el 2017.
“Ahora, la rentabilidad será positiva solamente por cumplir el acuerdo operativo entre la ANDE y la Eletrobrás”, indicó.
Incluso, el aumento abrupto de tarifas que se realizó hace un par de meses, debería elevar aún más la rentabilidad por encima del 8%, afirmó Encina.