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De acuerdo a las fuentes, la fábrica se reactivó sin el uso de las cuchillas, cuyas piezas se están esperando arriben al país. Están moliendo la materia prima, pasando casi directo la caña de azúcar, y sin cumplir con los procesos mínimos. Esta situación agrava el ya deficitario rendimiento que tiene la fábrica, uno de los más bajos de su historia, porque con el sistema empleado, se tiene una nula extracción y el rendimiento será aún más bajo, y además pone en peligro que se rompan otras piezas.
La operación en estas condiciones, de no aplicar las presiones hidráulicas requeridas en cada molino, trae como consecuencia que no se realice una buena extracción, y que tampoco se esté realizando adecuadamente la inhibición. Cabe puntualizar que la extracción del jugo de la caña de azúcar en los molinos se efectúa por la aplicación de la presión, a través de los cabezotes hidráulicos, en la masa superior del molino, y a través de una inhibición compuesta. En estas condiciones el rendimiento general de la planta sería bajísimo, de apenas 52 litros por tonelada, inferior a la de toda su historia, incluso peor de la era de Sergio Escobar, en que se llegó a producir solo 60 litros por tonelada. La era Escobar tal vez fue una de las peores en toda la historia de la estatal.
Por otro lado, el presidente de Petropar, Eddie Jara, exhibió días atrás un video sobre “el buen funcionamiento de la planta”, tratando de demostrar con ello que la planta no tiene problemas, aunque esto tampoco lo confirma, atendiendo a que las imágenes pueden o no corresponder al lapso denunciado así como tampoco descarta que están operando sin los riesgos citados, y sin registrarse las pérdidas económicas que implican el precario funcionamiento actual.
Hace casi dos años, este gobierno obligó al sector privado a comprar el alcohol de Petropar, entonces el más caro del mercado, ante el fracaso de la planta y la imposibilidad de competir en el mercado por su alto precio.