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–¿Cómo y cuándo surge la iniciativa de importar la energía de Acaray?
–Hace mucho tiempo ya teníamos la idea de vender energía de la central Acaray; pero, cuando los presidentes Fernando Lugo Méndez y Luiz Inacio Lula da Silva firmaron el acuerdo del 25 de julio de 2009 en Asunción quedó bien claro, en el punto 8, que la ANDE podría comercializar en el mercado brasileño energía de la hidroeléctrica de Acaray y, en el futuro, también de la represa Yguazú, cuando se encuentre maquinizada. Nosotros empezamos a movernos hace 6 años. En 2011 fue creada Mercosul Energy con el objetivo de hacer negocios entre los países miembros del bloque, en especial con Paraguay.
–¿Cuáles son las gestiones que realizaron ante las autoridades paraguayas y qué respuestas tuvieron?
–Empezamos a hacer gestiones en el gobierno del presidente Fernando Lugo y seguimos con el de Federico Franco y Horacio Cartes. Tuvimos varias reuniones con Mercedes Canese, exviceministra; Ricardo Canese, exmiembro de la Mesa Energética, y con varios ejecutivos de la ANDE, como Carlos Héisele. Estuvimos también con miembros del Consejo de Itaipú con alguien que siempre apoyó mucho todo esto, la excanciller y embajadora Leila Rachid, que en este momento es consejera de Itaipú. En esa oportunidad, todos estaban muy optimistas con que Paraguay pueda entrar a vender electricidad en el mercado libre de energía en Brasil, pues los precios son muy distintos a los practicados hoy día entre ANDE y Eletrobras.
–¿Cuál fue la propuesta que realizó a la ANDE y en qué condiciones?
–Mercosul Energy y ANDE hablaron de varios modelos de negocios, pero siempre dependía de la autorización del Ministerio de Minas y Energía de Brasil. El modelo es muy sencillo: Mercosul Energy firma el contrato con la ANDE; este es regido por los términos de la Cámara de Comercialización de Energía Eléctrica (CCEE), donde el vendedor y el comprador depositan las garantías para que en caso de interrupción estén todos asegurados. En el mercado de energía todos están muy bien garantizados, quien vende y quien compra; tanto que todos los meses la CCEE cobra el dinero y deposita en las cuentas lo que corresponde a cada empresa. Respecto a las condiciones, siempre hablamos de venta a precio de mercado.
–¿Cómo es el procedimiento en Brasil para comercializar la energía?
–El procedimiento es en base a las reglas de mercado, o sea, la CCEE es la que dicta las reglas, que son muy claras y dan seguridad, tanto al vendedor como al comprador. No existe retraso en los pagos, tampoco que no se entregue lo acordado en los contratos, pues, para eso están las garantías financieras depositadas.
–¿A qué atribuye Ud. la respuesta negativa de las autoridades brasileñas para concretar la operación?
–La respuesta negativa del Ministerio de Minas y Energía es porque no existen acuerdos firmados y el Paraguay dejaría de usar la energía de Acaray y utilizará más de Itaipú para su consumo interno. Una respuesta absurda, pues en innumerables reuniones que tuvimos nosotros les demostramos que Paraguay no va a dejar de cumplir lo que ya está acordado y lo más absurdo es decir que no existen acuerdos. ¿Y las firmas de los presidentes Lugo y Lula?, ¿y las firmas de los presidentes Cartes y Dilma Rousseff ratificando todo el acuerdo de 2009? Además, existe el Decreto Ley 42.919 del 30 de diciembre de 1957. Esta Ley pasó por los congresos de Brasil y Paraguay y fue firmado por los presidentes de aquella ocasión.
–¿En qué situación se encuentran ahora las gestiones de Mercosul?
–El 7 de julio pasado presentamos un nuevo pedido de revisión ante el Ministerio de Minas y Energía, dirigido al ministro Eduardo Braga, quien en este momento tiene la oportunidad de corregir las decisiones anteriores. Al firmar la autorización, simplemente estará respetando los acuerdos firmados en 2009 y ratificados en 2013. No se está solicitando nada fuera de lo que no está permitido. Yo aprendí con mi ya fallecido abuelo que si tú quieres que te respeten, primero tú tienes que respetar a los demás y Brasil, al no cumplir con todas estas firmas, no está respetando a sus propios presidentes.
ccantero@abc.com.py