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Nuevo rumbo
Creo sinceramente que el “nuevo rumbo” dio en el blanco con relación a negocios, no así en su club, ya que si no me equivoco nunca ganó una Copa Libertadores o una Sudamericana. Como primer navegante pienso que nunca supo lo que es un “rumbo” o en estos seis meses perdió el rumbo por culpa de sus tripulantes que lo aprietan para ligar “viejos rumbos” o por amigos a quienes debe dar rumbos. Tiene también el problema de confundir a las personas como los empleados de sus negocios, y su soberbia (kanguero) sale a la luz medio a menudo.
“Nuevo rumbo” para manejar el país a veces se asemeja a la mayoría de los seres humanos que siempre actúan para vivir sin dificultades haciendo las cosas con el “sentido común”, perdiendo así la libre expresión de su personalidad. El hombre exitoso, el que deja obras de valor inestimables generalmente fueron diferentes a los demás, ya sea en su niñez o en su juventud. Ejemplos, Churchill, Edison, Colón y muchos más. Churchill fue expulsado de la escuela por ser un pésimo alumno, Edison fue expulsado como retardado mental, Colón fue considerado como un loco. Muchos de nuestros compañeros en escuelas o colegios que caminaban sin rumbo ahora son profesionales famosos o comerciantes exitosos. El ser humano que vive con sentido común nunca tiene problemas, llega siempre a hora a su trabajo, realiza a satisfacción sus tareas, se retira a la hora que debe hacerlo, cumple sus compromisos sin inconvenientes, lleva digamos una vida rutinaria, tranquila, sin mayores sobresaltos, subiendo algunos escalones. Estos son como las plantas de eucaliptos, crecen derechos hasta llegar a la altura correspondiente y ahí se quedan. ¿Qué pasa si una planta de eucalipto se tuerce por la mitad y luego continúa derecha? Sería una novedad, una obra de arte, un eucalipto que dejó de lado el sentido común y se convirtió en una planta exitosa de valor inestimable. Así debiera ser el ser humano.
“Nuevo rumbo”, sea Ud. como ese eucalipto exitoso, deje de lado el sentido común, pero no como Chávez, Maduro, la viuda negra, la emperatriz, el bigotón cachafaz, los Castro, el cocalero y muchos más. Quede en la historia de nuestro país al encontrar y seguir realmente un “nuevo rumbo”, sea más cordial, alegre, jovial, pero duro con los que desean ir por el “viejo rumbo” de primero el zoquete y que se vea el resto. El pueblo así lo apoyará. Amigo es el que cuida, ayuda, aconseja, acompaña, apoya y proteje para el bien a su compañero, no el que le crea problemas y dificultades y lo lleva al fracaso.
Cándido A. Chamorro Riquelme
El carisma de Don Bosco
¿Dónde está hoy el carisma de Don Bosco? Una anécdota en la vida del Santo: Don Bosco está esperando el tren. Oye un griterío de jóvenes que se pelean, se acerca, todos huyen, menos uno; es el jefe de los vagos, le grita al sacerdote diciéndole: Y usted con qué derecho viene a dañar nuestro juego. No, yo vengo a charlar con ustedes como un amigo. Mi nombre es Don Bosco y tengo un colegio gratuito. ¿Quieres estudiar para ser una persona importante? Él le responde: yo no sirvo para estudiar, me llamo Miguel Magone, deseo ser bueno, pero no soy capaz. Si deseas ser bueno, lo serás. Al final del año era el mejor alumno del colegio.
Qué gran maestro y guía espiritual fue Don Bosco y qué bueno sería que el director del colegio Salesianito en vez de no renovar la matrícula de alumnos con dificultades en calificaciones hubiera hecho como Don Bosco, invitarles y alentarles para ser “personas importantes”, para eso es un colegio salesiano y si se pudiera escuchar las inquietudes de los padres dando audiencia para ello, ya que no la concede el director y si se consiguiera una comunicación telefónica, fuera amable y escuchara debidamente sin cortar por la cara de su interlocutor dando fin así a la molestia que se le ocasiona.
Muy grato sería que el colegio tan renombrado y respetado haga honor al lema de formar honrados ciudadanos y buenos cristianos, y como María Auxiliadora extienda sus brazos a todos los que se acercan.
Guadalberto Díaz Insfrán
Tráfico caótico y bicis
Sinceramente, ya no se puede vivir más en esta ciudad. Las pocas avenidas que tenemos están saturadas y encima se cierran para obras, que bien se pudieron haber hecho en enero, cuando el movimiento de vehículos era menor. ¡Con razón cada vez más gente agarra su bicicleta, aún cuando no hay ciclovías! Me parece muy bien, porque si vamos a esperar que la Municipalidad ponga la infraestructura adecuada, podemos quedarnos a esperar un milenio.
Juan Eduardo Cáceres