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Las autoridades monetarias aclararon que los antiguos billetes seguirán teniendo valor y que serán sustituidos de acuerdo con los procedimientos normales que se siguen para su destrucción.
El Banco Central estima que en un año, a más tardar, ya serán reemplazadas todas las unidades viejas que están en circulación actualmente, un total de 25 millones de unidades aproximadamente. Mientras que en la bóveda quedan todavía unas 650.000 unidades que repartirán en los próximos días, a la par de los billetes nuevos. En tanto que los antiguos billetes seguirán teniendo valor y se sustituirán cumpliendo los procedimientos normales que se siguen para su destrucción, aseguró Sixto Morínigo, gerente de operaciones de la banca matriz.
La principal ventaja que presentan estos nuevos billetes de polímero (plástico) es el tiempo de duración que tienen. Es decir, se estima que su vida útil ronda los dos años, mientras que los de algodón son relativamente cortos, un año de vida útil. Entre las muchas otras ventajas que ofrece el sustrato de polímero se mencionan la higiene, la reducción de falsificaciones y la reducción de los costos asociados a la emisión de billetes. Estos billetes tienen un costo promedio de G. 550 cada uno, mientras que el de algodón es de G. 350, pero a la larga al BCP le sale más barato el de polímero porque duran más. La empresa Canadian Bank Note Company Limited fue la encargada de la producción de los billetes y su costo fue de US$ 2.587.000, por unas 20 millones de unidades.
El BCP explicó además que estos billetes tienen una medida de seguridad muy característica, que es la ventana transparente, que los hace fácilmente identificables y prácticamente infalsificables.
El uso del polímero es frecuente especialmente en las bajas denominaciones que son de alta rotación y se deterioran más rápidamente. Por ello, el BCP no descarta la posibilidad de pasar también los billetes de G. 10.000 al mismo material.
Ya hay monedas
Por otra parte, el BCP recuerda al público en general que ya están disponibles las monedas de G. 100 y G. 500 en la tesorería del ente monetario. Su emisión fue aprobada por resolución del directorio el jueves último, por un total de 3 millones de unidades de monedas de G. 100 y G. 500. No así las monedas de G. 50, que traerán a Asunción en los próximos días.
Al parecer hubo dificultades en el transporte debido a la bajante del río, lo que retrasa aún más la llegada de las unidades.
Recordemos que el comercio, los servicios financieros y el público en general se quejan de la falta de monedas desde setiembre del año pasado.
Ante la falta de monedas, los comercios aplicaban redondeos de hasta 200 y 500 guaraníes, otros completaban con golosinas el vuelto a sus clientes.