Cargando...
De acuerdo con los registros del Banco Central del Paraguay (BCP), en solo siete meses (enero a julio), los compatriotas residentes en Argentina enviaron poco más de US$ 34 millones, que significa un incremento del 164% al comparar con las cifras del año 2015 durante el mismo lapso de tiempo, cuando sumaron apenas US$ 13 millones. Según estos datos, las familias beneficiarias recibieron US$ 21 millones más que el año pasado durante el mismo periodo.
Este repunte importante en el envío de dinero, según técnicos del Banco Central, se debe por un lado a una mayor formalización de los envíos de dinero. Los compatriotas se valían de otros métodos para el envío de las remesas a sus familiares, ya sea a través de conocidos o enviando en especies y productos.
Sin embargo, las cosas cambiaron desde la liberación de las restricciones de compraventa de dólares en Argentina, en diciembre último, pues a partir de allí los envíos de dinero registrados como ingresados en nuestro país fueron incrementándose, según se puede observar en el reporte económico del BCP. La liberación del cepo cambiario permitió que las remesas puedan transferirse libremente a través del sistema financiero, situación que estaba limitada por disposición del gobierno anterior (Cristina Fernández).
Incremento del 18%
Las remesas constituyen la fuente de ingreso de miles de familias paraguayas. En líneas generales, los envíos de dinero de compatriotas radicados en distintas partes del globo totalizaron a julio de 2016 unos US$ 291 millones, 18% más que en julio del 2015, y la mayor parte (54%) proviene de España.
Los envíos de los connacionales desde la nación europea repuntaron en 10% a julio de este año y sumaron US$ 153 millones, es decir, que las familias beneficiarias recibieron US$ 14 millones más que en igual periodo del año anterior.
Cabe señalar que en el 2015, las remesas de compatriotas sufrió una desaceleración, que no fue propia de los paraguayos. Se ha reportado que el 25% de los más de 2,3 millones de inmigrantes latinoamericanos que viven en España cobra menos de 600 euros mensuales, por debajo del salario mínimo, lo que ha hecho disminuir grandemente las remesas que enviaban a sus países de origen, según datos de una reciente encuesta.
Por otra parte, también se destacan los envíos desde otros puntos de la región como los de Brasil, desde donde se registran aumentos del 23%, sumando US$ 4,7 millones al séptimo mes del año, mientras que los envíos de dinero de los compatriotas desde Chile subieron 38% y sumaron US$ 3,6 millones de enero a julio de 2016, según los datos.