Las ONG devolvieron dinero al Indert, pero los pozos siguen sin funcionar

Aparece otro caso de un pozo que no funciona, pese a que el Indert realizó la recepción final de la obra, que incluyó la devolución de parte de los fondos recibidos por la ONG adjudicada. El sistema de compensación que resolvió el ente no sirve y las familias siguen sin agua potable.

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COLONIA CHOFERES DEL CHACO, Arroyito (Aldo Rojas Cardozo, corresponsal). ¿De qué le sirve al Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) que una ONG le devuelva una mínima parte de todo el dinero recibido para perforación de pozos, si al final los asentamientos van a continuar sin agua potable? Es la pregunta que corresponde hacer, al considerar que el ente entregó casi G. 2.500 millones a la Fundación Cerro Lambaré (Fucela) para proveer sistemas de agua a cinco localidades de Horqueta (Concepción), pero en lugar de garantizar el funcionamiento de las instalaciones, el ente se limitó a pedir la devolución del 2% que entregó a dicha organización.

Este diario pudo verificar que las 35 familias de la comunidad Choferes del Chaco siguen sin tener agua potable. Según los pobladores de la colonia, el trabajo realizado en el sitio no funciona debido a un mal entubamiento que no permite una buena distribución del agua. El lugar donde se construyó el tanque se encuentra a 3,5 kilómetros de la Ruta V “Gral. Bernardino Caballero” a la altura del kilómetro 71, en el nuevo distrito de Arroyito, zona conocida como “Calle 15”, sector norte.

Sin esperanzas 

Daniela Benítez, propietaria del inmueble donde se realizó la perforación y secretaria de la comisión pro agua, señaló que ya todos los moradores han perdido las esperanzas en tener agua potable de ese pozo.

“La comunidad pidió que se haga otro pozo porque el que tenemos no funciona, la calidad del agua es buena, pero el trabajo de entubamiento se hizo mal, por eso el agua no llega a la casa de los pobladores. Pareciera ser que el trabajo lo realizaron personas que no son profesionales, lamentablemente el lugar está abandonado y el pozo no se llegó a utilizar. La perforación tiene una profundidad de 102 metros, pero a los 40 metros fue el problema porque se encastró mal el tubo y el agua no sale”, explicó.

Agregó que en varias ocasiones se ha intentado que la comunidad tenga agua potable, pero hasta hoy eso es solo un sueño. “Tenemos 5 años de lucha, pero seguimos sin agua. La comunidad ya perdió las esperanzas, se sufre mucho cuando hay sequía”, sostuvo.

Finalmente, comentó que a principios de año vinieron funcionarios del Indert a mirar el pozo, pero la comisión pro agua no supo ni siquiera para qué estuvieron allí.

Recepción final 

Documentos a los que accedió nuestro diario indican que en febrero de este año, el Indert, presidido por Justo Cárdenas, había realizado una supuesta compensación de costos vs trabajos realizados por la ONG.

Para el efecto, envió a un equipo verificador dirigido por el funcionario Inocencio Bogado, sin conocimiento en construcciones ni áreas afines, y encontró que Fucela ejecutó “de más” por G. 5,7 millones y “en menor cantidad”, por G. 28 millones, por lo que pidió la devolución, en este caso, de G. 22,6 millones.

En total, por esta y otras obras en localidades aledañas, la ONG devolvió apenas G. 49,6 millones, que es 2% de todo lo recibido. El 98% restante no sirvió para que el sistema esté operativo. 

Nadie responde 

Nuestro diario intentó tener una explicación de parte de los responsables de Fucela, Edelmira De Giacomi de Andreotti y Patricia Zulema Báez Sosa, pero nos fue imposible encontrar un número de teléfono de la ONG, que ni siquiera cuenta con página web. En tanto que la señora Edelmira no contestó su teléfono celular, con terminación 869.

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