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El plano de estiba es un documento que deben portar obligatoriamente todos los buques que realizan transporte de contenedores. Consiste en un croquis donde consta la ubicación de cada uno de los containers que lleva la embarcación.
Con el plano de estiba es posible determinar con absoluta precisión dónde ha sido colocada una carga. Los entendidos comentan que incluso los dueños de las mercaderías pueden elegir el lugar y que hay sitios más caros que otros, como si fueran butacas en un teatro.
Si en el plano de estiba figura que el contenedor ECMU1337647, con lacre original número 1:0925819, fue ubicado en el sótano del buque "Aliança Mauá", boca a boca con otro contenedor, como aseguran es práctica común cuando la carga es valiosa, entonces no existe posibilidad de que haya sido violentado manualmente durante el viaje marítimo. En este caso, el robo solamente pudo haberse perpetrado en Montevideo o durante la travesía hasta Asunción.
En cambio, si figura que dicho contenedor fue ubicado en cubierta y sin la obstrucción de otro similar, entonces la primera opción sería perfectamente factible.
Si este último fuera el caso, cabría investigar quién tomó la decisión de que el contenedor fuera colocado en ese lugar, y allí habría una pista de los responsables de este robo.
Hemos hecho numerosas llamadas telefónicas a São Paulo, donde tiene su sede la compañía Hamburg Süd, propietaria del buque Aliança Mauá, para solicitar el plano de estiba. También lo intentamos con sus agentes en el Paraguay, la Compañía Marítima Paraguaya, que también es dueña del carguero que realizó el viaje a Asunción. Hasta ahora, no hemos tenido suerte.
Con el plano de estiba es posible determinar con absoluta precisión dónde ha sido colocada una carga. Los entendidos comentan que incluso los dueños de las mercaderías pueden elegir el lugar y que hay sitios más caros que otros, como si fueran butacas en un teatro.
Si en el plano de estiba figura que el contenedor ECMU1337647, con lacre original número 1:0925819, fue ubicado en el sótano del buque "Aliança Mauá", boca a boca con otro contenedor, como aseguran es práctica común cuando la carga es valiosa, entonces no existe posibilidad de que haya sido violentado manualmente durante el viaje marítimo. En este caso, el robo solamente pudo haberse perpetrado en Montevideo o durante la travesía hasta Asunción.
En cambio, si figura que dicho contenedor fue ubicado en cubierta y sin la obstrucción de otro similar, entonces la primera opción sería perfectamente factible.
Si este último fuera el caso, cabría investigar quién tomó la decisión de que el contenedor fuera colocado en ese lugar, y allí habría una pista de los responsables de este robo.
Hemos hecho numerosas llamadas telefónicas a São Paulo, donde tiene su sede la compañía Hamburg Süd, propietaria del buque Aliança Mauá, para solicitar el plano de estiba. También lo intentamos con sus agentes en el Paraguay, la Compañía Marítima Paraguaya, que también es dueña del carguero que realizó el viaje a Asunción. Hasta ahora, no hemos tenido suerte.