La “buena onda” es insuficiente para defender nuestros intereses

La “buena voluntad” y la “buena onda” no son suficientes para defender los intereses paraguayos, advirtió el Ing. Orlando Valdés, presidente de AISEP, en entrevista con ABC Color sobre el tratado de Itaipú, que el día 26 de este mes cumple 43 años y los casi míticos 50 años de vigencia el 13 de agosto de 2023.

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–¿Cómo debe prepararse nuestro país para encarar las negociaciones que se iniciarán en el 2023, año en que el Tratado de Itaipú cumple 50 años de vigencia?

–A pesar de que aún faltan siete años, debería iniciarse inmediatamente. Algunas de las tareas que deben realizar se relacionan con el análisis de los escenarios probables, o que deberán construir para los próximos años. Estos escenarios deberán considerar las condiciones, internas (nacionales) y externas (internacionales) de las variables relacionadas con el sector energético, incluyendo cálculos para determinar el saldo probable de la deuda para el año 2023, condiciones actuales y futuras del sistema eléctrico interconectado, en términos de crecimiento de los niveles de demanda de potencia y energía, de la disponibilidad de infraestructura para su transporte a los centros de carga del país y las potencias disponibles en las interconexiones internacionales para el intercambio de la energía excedente con los países vecinos, específicamente Argentina, Brasil y Bolivia.

Nuestro país no cuenta hoy con un organismo fuerte para la elaboración de estos trabajos, que no debe realizarse en las binacionales porque son parte interesada y porque la mayoría de los funcionarios están alquilados a nuestros socios.

Tampoco en la ANDE porque no es su tarea o en el Viceministerio de Minas y Energía, porque no dispone de los talentos y recursos financieros para desarrollar estas actividades. La mesa energética tampoco es el lugar adecuado para analizar y acompañar este estratégico tema, ya que no es un órgano planificador, ni contralor y menos aún, encausador de la política energética nacional. A nuestro entender es un foro en el que el representante de cada subsector energético relato su mejor cuento al Presidente de la República o a su enviado.

En el 2023 estará en juego una oportunidad de importancia vital para el desarrollo del país y, si se observa lo que está ocurriendo en Yacyretá, podríamos inferior que solo este hecho abona con creces la tesis de la urgente creación de un Ministerio de Minas, Energía e Hidrocarburo. (MEM).

–Entonces, la experiencia de nuestros negociadores en el caso Yacyretá deja muy pocas enseñanzas de cara al 2013, que ya está a la vuelta de la esquina. Me refiere a las futuras tratativas con los brasileños sobre Itaipú.

–Evidentemente el caso de Yacyretá es una poderosa señal de alerta, en el sentido de que está demostrado que no se puede improvisar en este tema, que es un proceso que debe iniciarse con mucha antecedencia, que es necesario transparentar el manejo de las binacionales, que es la única manera de conseguir el aval de la población. Durante la revisión del Anexo C, nuestros socios en las binacionales deben recibir, con absoluta claridad, la señal de que las propuestas paraguayas tienen el apoyo de la población, que ya no tolerará los acuerdos entre cuatro paredes.

Deberían seleccionar ya a los futuros negociadores y los seleccionados ya deberían estar acompañando el día a día de nuestra realidad energética. Estas personas deben poseer un alto grado de conocimiento del tema y especialmente patriotismo y dosis muy elevadas. El proceso de calificación de los integrantes del equipo debería incluir, se considera necesario, la asistencia internacional de países no involucrados en los futuros arreglos. La entrega de nuestra soberanía hidroeléctrica en Yacyretá, perpetrada por un reducido grupo de empleados ambiciosos y sin escrúpulos, en complicidad con los detentores del poder político circunstancial, no debe repetirse en Itaipú.

–Si en el 2023 Itaipú aún carga con un saldo deudor a favor de Electrobras, entenderán nuestros negociadores de turno la relevancia del segundo requisito que establece el numeral VI-Revisión del Anexo C del Tratado de Itaipú a la hora de finiquitar las cuentas? Nos referimos a: “... teniendo en cuenta, entre otras cosas, la relación entre las potencias contratadas por las entidades de ambos países”.

–Hasta el 2023 muchos cambios se producirán en nuestro país y en Brasil. Además de la divulgación y comprensión por parte de nuestra gente, e inclusive de la brasilera, del corrupto manejo existente. En ese escenario ya no le será tan fácil a nuestro socio desconocer las cláusulas convenidas en los documentos que integran el Tratado. Hoy, incluso es fácil comprender que la aparición o no de un saldo de la deuda de Itaipú en el 2023 depende exclusivamente de que nuestros actuales representantes en la entidad cumplan con su trabajo, evitando que eso suceda. Si así no lo estuvieren haciendo, deben ser removidos de inmediato.

–¿Cómo deberá encararse la implícita prohibición que figura en el Art. XIV, del Tratado de Itaipú, de que vendamos nuestro excedente a un tercer país e incluso una empresa brasileña, pero a precios de mercado?

–Las condiciones iniciales que existieron en ocasión de la firma del Tratado de Itaipú cambiaron en forma radical con el paso del tiempo, es así que en pocos años más estaremos en condiciones de utilizar prácticamente el 100% de nuestra potencia disponible en las diez unidades de 50 ciclos. Esta condición física hoy obliga, a ambas partes a rever todo lo acordado con anterioridad, buscando un nuevo punto de equilibrio.

Dependerá de nuestros representantes obtener el mejor acuerdo posible para nuestro país, ya que revisar el Anexo C, en la práctica, significa acordar nuevos parámetros económicos para el manejo de la entidad, en un escenario totalmente diferente al inicial y, desde luego, partiendo de premisas totalmente diferentes, como lo es la deuda cero de la binacional y la capacidad de Paraguay de requerir toda su potencia disponible en la central de 50 Hz.

–¿Cómo evalúa la posibilidad de que nuestro país, finalmente, ventile el caso ante el Tribunal Internacional de La Haya?

–Esta es una posibilidad que nunca debe descartarse, más aun conociendo el histórico del comportamiento de nuestros socios. Es más, consideramos que se debería elaborar y tener ya disponible un borrador de denuncia sobre los abusos cometidos para su presentación inmediata, ante cualquier situación de dilación durante la revisión del Anexo C. Recordemos que la fecha de revisión del Anexo C de Yacyretá ya venció hace más de dos años, sin embargo, no existe ningún avance sobre el tema. Esta realidad obliga a que estemos preparados para realizar la presentación correspondiente. Creemos que la “buena voluntad” y la “buena onda” no son condiciones suficientes para defender los intereses de la República del Paraguay.

13 de agosto de 2023

El Art. VI - Revisión del Anexo C del Tratado de Itaipú señala que sus disposiciones ”serán revisadas después de transcurrido un plazo de 50 años a partir de la entrada en vigor del Tratado”.

Los instrumentos de ratificación del documento fueron canjeados en Asunción el 13 de agosto de 1973, acto que consagra el inicio de su vigencia. En consecuencia, la meta esperada por nuestro país es el 13 de agosto de 2023.

rcasco@abc.com.py

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