Inseguridad jurídica es origen de los males, sostiene la APS

La creciente inseguridad jurídica que amenaza a productores agrícolas de todo el territorio nacional, con duplicación y hasta triplicación de títulos de propiedad, así como superposiciones, son el origen de los males que afectan al agro, que propician las invasiones y hasta muertes de labriegos, según dijo el titular de la Asociación de Productores de Soja (APS), Karsten Friedrichsen.

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Para el gremio APS la agricultura tuvo este año balance favorable desde el punto de vista de la producción, a pesar de que inicialmente se pensó que podría haberse afectado por el fenómeno La Niña (sequía), dijo en una entrevista el líder de APS, Karsten Friedrichsen.

“Tuvimos un 2016 dentro de todo favorable, por suerte los fenómenos climáticos adversos no se dieron en el Paraguay y la productividad fue buena, aunque los precios no en la medida esperada”, indicó.

Comentó que en relación a los precios de los granos, Paraguay no tiene incidencia directa, y este año la cotización de los commodities pasaron por momentos difíciles. “La coyuntura de los precios de los granos forma parte del negocio, y sabemos que afecta a productor y al cadena productiva pero son momentos que pasan, no así con la inseguridad jurídica que no tiene solución ni a mediano plazo”, enfatizó.

Friedrichsen manifestó que la incertidumbre jurídica que afecta a los productores agrícolas, y a las cooperativas de diferentes zonas del país, deteriorando la imagen del país, causando pérdidas económicas y perjuicio moral. “Desde hace más de un años estamos hablando con colegas y varios sectores sobre la seguridad jurídica que no existe en Paraguay, porque aparecen títulos de propiedad superpuestos, que causan invasiones de tierras. Y además, no se encuentra las respuesta clara del ámbito jurídico del Gobierno”, expresó.

También dijo que los problemas catastrales en las fincas productivas siempre vuelven a ocurrir, de la nada aparecen títulos fantasmas, que ponen el jaque a propiedades que tienen títulos de más de 40 años.

“El problema afecta a labriegos de Itapúa norte, Alto Paraná sur, Alto Paraná norte, Los Cedrales, Alto Chaco, etc., y no se trata de un problema aislado, porque se repite por todo el territorio, es muy grave, y no se ven solución”, manifestó.

El titular de la APS opinó que la inseguridad material o física, que ya ocasionó la muerte de varios agricultores, se produce en virtud de la inseguridad jurídica.

“Una cuestión no resuelta en litigios con ocupantes, campesinos que quieren entrar a una propiedad, cuando no hay un fallo definitivo, o una respuesta clara del Gobierno, eso es lo que genera la inseguridad física”, acotó. Como propuesta de solución, Friedichesen considera que el diálogo pacífico es la única salida para determinar a través de un estudio minucioso del título, que busque hacer respetar la propiedad privada consagrada en la Constitución Nacional del Paraguay.

Recordemos que a fines de octubre pasado, fueron asesinados dos trabajadores de campo, en eventos diferentes, en Santa Lucía y Minga Porã, Alto Paraná.

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