Incoop reconoce debilidades y limitaciones en la supervisión

Ante un nuevo caso de quiebra de una cooperativa de producción, el titular del Instituto Nacional de Cooperativismo (Incoop), Félix Jiménez, reconoció las limitaciones que tiene el ente a su cargo para hacer frente a la supervisión de varios centenares de entidades, ya que solo cuentan con 20 fiscalizadores.

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Jiménez detalló en una entrevista con ABC Cardinal que para fiscalizar una cooperativa grande del tipo A se requieren por lo menos tres fiscalizadores. Actualmente están intervenidas 9 entidades, lo que mantiene ocupado prácticamente a todos los fiscalizadores del Incoop, que son 20 en total.

Entre las de mayor porte que ahora están bajo intervención figuran la Cooperativa Luque Ltda., Coop. policial 17 de Mayo, Cooperativa Fernando de la Mora (Cofedelmo) y Cooperalba de Canindeyú.

“Estamos sin personal, prácticamente, para atender todas estas diligencias”, lamentó Jiménez. El Incoop debe supervisar a unas 1.000 entidades que figuran como activas en el registro de esta institución.

Justamente esta semana la Cámara de Senadores rechazó un paquete de pedidos que incluía la ampliación presupuestaria para el órgano regulador de las cooperativas, decisión que frenará la posibilidad de contratar a más profesionales fiscalizadores y auditores.

La crisis en el sector cooperativo se acentuó en los últimos años, ante las debilidades en su regulación y supervisión. Los últimos casos de quiebras dejaron en evidencia las falencias del órgano regulador en el seguimiento oportuno para evitar la caída.

Cooperativas emblemáticas como Gral. Artigas, Cnel. Oviedo y Coopemag son solo algunos ejemplos que saltaron el año pasado, donde los malos manejos de dirigentes y malas decisiones de las asambleas llevaron a la quiebra a las entidades que dejan cuantiosos daños y miles de perjudicados entre socios y acreedores.

“No sé si decir quiénes son culpables, porque estaría hablando de mi institución, porque en gran parte, la responsabilidad es del Incoop en el sentido que se podía haber evitado estas quiebras si se hacía un control como se debe. Con una supervisión adecuada y planes de acción eficientes, no se iba a llegar a esto”, expresó Jiménez.

Añadió que si hay una decisión de la asamblea sobre inversiones millonarias (compras de bienes, fábricas), muy poco es lo que se puede hacer para evitar el riesgo enorme que esto representa para una entidad.

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