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El cargamento de referencia tendría un valor aproximado de 5 millones de dólares, de acuerdo a las averiguaciones preliminares. Los valores son estimativos y se calculan en función a la pérdida que hubiera significado a los titulares de las marcas su posible comercialización y puesta en el mercado de consumo.
Esta cifra representa el 62% de lo que se incautó en nueve meses durante operativos similares en el 2016, según datos de la DNA, cuando se reportó el decomiso de productos falsificados de la misma línea por valor de US$ 7,1 millones. También en abril, pero del año pasado, se había reportado incautaciones de artefactos celulares por valor de US$ 4.800.
El operativo que se llevó a cabo este martes fue encabezado por la Coordinación Administrativa de Investigación Aduanera (CAIA) y contó con la participación del fiscal de Marcas, Abog. Diego Zilbervarg, en seguimiento a una investigación de perfiles de riesgo, en torno a un contenedor que se encontraba en las instalaciones del puerto privado de Caacupemí.
En la ocasión, la comitiva interinstitucional que procedió a verificar la carga en cuestión corroboró la situación irregular de la misma, por lo que dispuso su decomiso, en cumplimiento de disposiciones legales vigentes, por tratarse de la posible comisión de hechos punibles contra la propiedad intelectual y hechos conexos.