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El primer cuestionamiento de los funcionarios fue que numerosas estaciones fijas de control no funcionan bien, ese es el caso de las ubicadas en Guayaybí y Cerrito y que en algunas zonas, esta situación es la constante.
Según lo explicado, los equipos, que son de la marca Toledo, funcionan durante algunas horas del día y luego dejan de hacerlo, por lo que el control de peso se realiza a “ojímetro”, dejando el trabajo a la discrecionalidad del operador.
Los funcionarios dijeron que el mismo problema de mal funcionamiento se tiene con las estaciones móviles de control, que son de la misma marca. Insistieron en que probablemente se trate de una cuestión de mala calidad de los equipos.
Coimas
Lo más grave de todo es el “plus” que cobran cuando una carga no está en regla, resaltaron. “El exceso de peso es normal y el cobro de coima también”.
“ En algunos casos, en esta práctica que se volvió habitual, los encargados de turno cobran entre G. 400.000 y G. 500.000, pero en algunas estaciones se cobra de acuerdo con el valor de la carga. Por ejemplo, por una carga de mandioca cobran menos que por soja”, explicaron.
Otra irregularidad denunciada hace referencia a la incompetencia del funcionariado de báscula.
“Algunos no saben leer ni escribir. Van a cumplir horario, pero no hacen nada. Lo peor es que cobran un sueldo de más de G. 3 millones solo por tener padrinos en el Congreso y mientras tanto, otros funcionarios, que sí trabajan y están capacitados, apenas ganan G. 1.300.000”, dijeron.
Estos problemas siempre existieron en el área de control de peso, según lo explicado, pero que se intensificó durante el gobierno del expresidente Federico Franco y ahora siguen las mismas personas.
“Se ve que el nuevo gobierno trata de cambiar todo esto, pero la rosca ya está instalada. Por ejemplo, el jefe de básculas se cambió por lo menos seis veces en los últimos tres años y en todo este tiempo, son las mismas personas las que van rotando en ese cargo. Al final no cambia nada”, se quejaron.
El jefe de básculas en la época de Federico Franco era Adalberto Alderete, mientras que ahora es Jorge Cuandú.