Se trata de la firma Enero S. A., que producirá biodiésel a partir de grasa animal y aceite vegetal, dando empleo a 20 personas en forma directa y a unas 500 en forma indirecta.

Al respecto, el director de Enerco, Roberto Pujol, señaló que la fábrica fue desarrollada enteramente por técnicos paraguayos, con una inversión de aproximadamente 2.000 millones de guaraníes.

“Nuestra firma ha preferido correr el riesgo de proyectar una planta absolutamente paraguaya, en el convencimiento que en este país existen profesionales capaces en todas las disciplinas y siendo conscientes de que se iban a presentar dificultades, pero que, con la dedicación, esfuerzo e inteligencia, podríamos superar los obstáculos para convertir nuestros sueños en presente de trabajo y energía alternativa”, afirmó.

Anunció el desarrollo de un próximo proyecto, que consistirá en una fábrica de aceite vegetal, que requerirá una inversión de 1.000.000 de dólares, y que se convertirá en proveedora de materia prima de la planta de biodiésel.

Esta es la tercera planta del rubro que se pone en marcha en menos de tres meses, lo que permitirá al país tener una capacidad total de producción de más de 22.000.000 de litros, lo cual haría posible mezclarlos hasta el 3% con el diésel.

La primera planta en ponerse en marcha pertenece a Frigorífico Guaraní, con 12.000.000 de litros anuales de producción, y la segunda es Bioenergía, con 4.000.000 de litros anuales.

Al respecto, el ministro Ibáñez dijo que la apertura de la nueva empresa revela el gran interés del sector privado en el desarrollo del Plan de Biocombustibles, tanto en el rubro del biodiésel como del etanol.
“Me siento contento porque el plan, que estamos liderando en el Ministerio de Industria y Comercio, que quiere convertirse en el Ministerio de Desarrollo del país, está prendiendo. Se está comenzando a sentir la efervescencia del sector empresarial y el sector inversionista, con proyectos nuevos”, resaltó el secretario de Estado.

Entre las interesadas aparecen varias firmas de Estados Unidos, Gran Bretaña, Holanda y otras naciones europeas que ven a Paraguay con mucho potencial para este nuevo negocio.
Según Ibáñez, para los próximos cinco años, el país estaría captando inversiones en el sector de biocombustibles por valor de 1.000 millones de dólares.

Dijo que el biodiésel es el “buque insignia” de la transformación productiva del país, dando mayor valor agregado a las materias primas de origen agropecuario.