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El gobierno de Cartes planea realizar el próximo año su quinta colocación de bonos soberanos y, para ello, planea incluir en el proyecto de Presupuesto General de la Nación 2018 una emisión de alrededor de US$ 500 millones. Este monto ya se maneja a nivel técnico del Ministerio de Hacienda, aunque todavía falta la definición final, pues el proceso de elaboración del plan de gasto entrará en etapa de consolidación en agosto.
La nueva emisión proyectada servirá en gran parte para “bicicletear” la deuda que vence y una menor parte se destinará a inversiones en infraestructura, llevada adelante principalmente por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). De confirmarse el referido monto, la deuda total en bonos soberanos que el presente Gobierno dejará en agosto de 2018 ascenderá a US$ 2.880 millones.
Emisiones
El Ejecutivo emitió bonos soberanos en 2014, 2015, 2016, 2017 y prevé también para 2018, con la excusa de aumentar las inversiones necesarias para desarrollar el país. Sin embargo, contradictoriamente en los últimos tiempos aumentó el desempleo y la pobreza.
A poco de asumir la administración del Estado, el Gobierno en 2014 realizó una colocación de US$ 1.000 millones, el mayor monto registrado hasta ahora, con tasa de interés de 6,1% y vencimiento del capital en 2044.
Al siguiente ejercicio emitió US$ 280 millones (reapertura de emisión 2013 realizada por el gobierno de Federico Franco), con una tasa de interés de 4,1% y vencimiento en 2023.
El año pasado colocó por US$ 600 millones, a tasa de interés de 5% y vencimientos en 2026; y en marzo del actual ejercicio emitió US$ 500 millones, a tasa de interés de 4,7% y vencimientos en 2027.
La deuda pública total al cierre del mes de mayo totalizó US$ 6.928,5 millones, que se da principalmente por la colocación de bonos soberanos.
En este Gobierno la deuda creció 65,9%, lo que ya representa el 23,3% del PIB.