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Así lo indicó el director de la firma, Sergio Paulo Soares, quien lamentó que el Gobierno de su país siga sin cumplir los acuerdos internacionales firmados con Paraguay en 2009, al no autorizar que su empresa pueda importar la energía eléctrica producida por Acaray. “Esto hace que el Paraguay busque ahora alternativas para vender esa misma energía a Chile y Uruguay”, se quejó.
El empresario advirtió que la energía de Acaray tiene que pasar necesariamente por Brasil o Argentina para llegar hasta Uruguay o Chile, por lo que la Cancillería de nuestro país debería conformar una comisión para ir al Brasil a negociar, ya que están vigentes los tratados.
Recordó que la comisión de relaciones exteriores del Senado paraguayo también envió una carta al presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso de Brasil para pedir una reunión para tratar el tema.
El martes último quedó conformada en la Cancillería una Mesa de Trabajo, que tendrá a su cargo realizar un seguimiento a los acuerdos internacionales firmados por el Gobierno con Uruguay y Chile, respectivamente, para concretar la venta de energía paraguaya de Acaray.
Esta no es la primera vez que se intentará realizar esta operación; puesto que en 2011, bajo el gobierno de Fernando Lugo, se había planteado el mismo operativo, pero fracasó debido a que la Argentina condicionó la utilización de sus redes y estableció un “peaje” muy elevado de 50 dólares, cuando que al Brasil le cobraban sólo entre 8 dólares y 10 dólares.