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Felippo manifestó que muchos de los datos contenidos en el Índice de Competitividad relativo al Paraguay son percepciones de los propios paraguayos. “Si pregunto a todos los que están acá, incluyendo a los extranjeros, cuál es el mejor país del mundo para vivir, y todos me van a decir que es Paraguay; sin embargo, cuando alguien nos llama por teléfono a pedirnos nuestra opinión, empezamos a hablar mal de nuestro país”, lamentó.
Añadió que el hecho de que en ocasiones se hable mal del país, no es que hay una intención destructiva, sino que uno a veces responde sobre la base de sus propias frustraciones, “porque quisiéramos que todo esté mejor, pero no estamos tan mal. Hay que viajar para ver lo que es la corrupción, y no muy lejos”.
Felippo pidió a los empresarios presentes que la próxima vez “piensen antes de responder” el cuestionario que el Foro Económico Mundial utiliza para llevar a cabo la encuesta, cuyos resultados finalmente se colocan en el mencionado índice.
Por otra parte, manifestó que el Paraguay tiene que comenzar a mirar con mayor intensidad el resto del mundo. “El barrio es interesante, somos todos amigos, nos gusta hablar con la gente del barrio, pero el mundo es donde tenemos que apuntar, sin ningún complejo de inferioridad. Y eso es lo que estamos haciendo con este tipo de actos, que es muy importante para llevar adelante acciones conjuntas para mejorar las cosas”, dijo.