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La versión dada por los ferroviarios coincide con el tenor de una nota enviada, había sido, ya en mayo pasado por el citado grupo europeo “R&M Infrastructure Projects Holdings AG”, directamente desde Suiza al presidente electo, Horacio Cartes, y cuyo contenido fue conocido ayer.
En su momento, el Dr. Ricardo Franco Lanceta, quien hasta su fallecimiento, el 6 de julio pasado, fue presidente de la Cooperativa Ferroviaria, ya había adelantado que los europeos esperarían un gobierno más sensato para no seguir chocando con los “obstáculos absurdos” que habían puesto, sucesivamente, las administraciones de Fernando Lugo y Federico Franco al proyecto de rehabilitación del sistema de trenes entre Asunción y Encarnación.
La nota, a cuya copia tuvo acceso ayer nuestro diario y que está firmada por el presidente de “R&M” de Suiza, Gunther F. Kuhn, y la titular de “R&M Paraguay SA”, Lic. Luisa Krug, expresa que el grupo “ratifica plenamente el apoyo de financiamiento y asistencia técnica necesarios para la reactivación del ferrocarril” paraguayo, de acuerdo al contrato firmado en enero de 2011 con la Cooperativa y según el “contrato de mandato” suscrito en 2010 por la Cooperativa con Ferrocarriles del Paraguay SA (Fepasa).
En los planes previos, y con base en el proyecto técnico entregado en su momento a las autoridades, se calculaba que el emprendimiento podía necesitar más de US$ 600 millones, pudiendo llegar incluso a los US$ 800 millones, fondo que sería aportado por “R&M” sin la garantía del Estado paraguayo, según se consigna de nuevo también en la nota enviada esta vez a Cartes.
Obstáculos “irracionales”
En su carta, los directivos del holding europeo no ocultan su molestia por el trato recibido junto a sus socios ferroviarios de parte del Gobierno en los últimos dos años, en este caso desde que asumió la titularidad de Fepasa el Lic. Marcelo Wagner (mayo 2011), a quien se unió en la oposición al proyecto, en 2012, el ministro de Obras Públicas, Enrique Salyn Buzarquis.
Al respecto, dicen que esperan esta vez un “apoyo irrestricto (...) a este emprendimiento de gran trascendencia para Paraguay, dado que lamentablemente ha sufrido de contratiempos irracionales (...) por parte del anterior y actual Gobierno”.
La Cooperativa y sus socios europeos habían llegado incluso a hacer un acto de lanzamiento para los inicios de los trabajos en octubre de 2012, pero el MOPC frenó todo de nuevo, alegando que la garantía de un banco suizo presentado por “R&M” era insuficiente. Fue una excusa para ganar tiempo y construir en la franja de dominio del ferrocarril la polémica avenida “Ñu Guasu”.