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La pérdida en la facturación de la ANDE es el resultado de la simple resta entre la energía neta entregada al mercado nacional, que el año pasado fue de 15.574.996.000 Kwh y la energía efectivamente facturada, que asciende a 11.237.933.000 Kwh.
Esta operación da una diferencia de 4.337.063.000 Kwh, que multiplicado por una tarifa promedio de G. 400, vigente para uso doméstico o viviendas, da como resultado de energía no facturada de G. 1.734.825.200.000, que al tipo de cambio de la víspera (G. 5.900 por dólar) equivale a US$ 294.038.169. En ese contexto, el ente eléctrico nacional registró pérdidas en transmisión por 897.351.000 Kwh, consumo propio en transmisión 6.620.000 Kwh, pérdidas en distribución por 3.100.354.000 Kwh, y consumo por alumbrado público por 332.738.000 Kwh.
Por otra parte, siempre de acuerdo a los datos oficiales, la ANDE también registró pérdidas el año pasado en la facturación de energía exportada. En ese sentido, la energía neta entregada fue de 73.025.000 Kwh, de los cuales fueron derrochadas 2.532.000 Kwh, y fueron facturados 70.493.000 Kwh. Cabe señalar que en el Pliego de Tarifas no figura la que rige para el mercado externo.
Peces gordos
Por otro lado, el presidente de la empresa pública afirmó ayer a ABC Cardinal que los 300.000 usuarios que son beneficiados con la denominada “tarifa social” les cuesta a la empresa pública entre US$ 12.000.000 y US$ 14.000.000, de los cuales la pérdida por hurto directo oscila entre US$ 6.000.000 y US$ 7.000.000. Dijo que el ente cuenta actualmente con un total de 1.600.000 usuarios.
Anunció que se están preparando para tratar de atrapar a aquellos peces gordos, que representan el mayor porcentaje de los hurtos (44%), y que están ubicados en este del país (principalmente Alto Paraná). Dijo que estos consumidores de gran porte: casas lujosas, industrias y comercios.
Indicó además que para este proceso, la ANDE trabajará en la organización de su propia gente, estableciendo reglas claras y otorgando el respaldo de las autoridades institucionales, “porque esta situación ya no la vamos a permitir”.
Adelantó asimismo que harán un “trabajo bien sencillo”: determinar cómo se le roba a la ANDE y que prioritariamente van a regularizar a los mayores consumidores, en el marco de una estrategia que incluirá la incorporación de “mucha tecnología”. Acotó que instalarán más medidores en la red, de manera de determinar el consumo real y los “excesos”, que pueden derivar en los hurtos.