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La empresa Proyectos y Construcciones, de Emigdio Lovera Martínez, continúa reclamando a la INC el pago de una supuesta deuda de US$ 2,4 millones. La firma, contratada en noviembre de 2009 durante la administración de Optaciano Gómez Verlangieri, alega que suministró los 56.000 metros cúbicos de fueloil acordados pero, en realidad, hay pruebas de que no solo incumplió en cantidad, sino también en calidad (ver cuadro).
Ante esta situación, la INC solicitó a la PGR su opinión sobre el caso, ya que se trata de la institución encargada (al menos en teoría) de velar por los intereses del Estado.
Documentos proveídos a la Procuraduría revelan que el combustible entregado por Proyectos y Construcciones tenía un menor poder calorífico que el requerido. Durante la época de provisión de esta firma, en lugar de producir 2.000 toneladas de clínker por día, el horno de INC apenas llegaba a 1.100 toneladas. Si se quería alcanzar la cantidad normal de producción, se debía consumir el doble de fueloíl normalmente utilizado, que es 180 metros cúbicos.
Eso demuestra que la exproveedora no solo incurrió en demoras en la entrega (que fueron muchas), sino además habría cometido una estafa contra la INC, ya que recibió millonarias sumas de dinero para la provisión de un tipo específico de fueloíl, bastante refinado, pero terminó entregando uno de calidad inferior.
ABC comprobó también que la empresa incumplió varias cláusulas del contrato. Además de la 1 y la 5.2 en la que se establece la cantidad de entrega y el cronograma de suministro, tampoco cumplió con las 11.1 y 11.2, que definían la obligatoriedad de realizar análisis de cantidad y calidad por cada carga entregada, ya que el documento resultante de esas verificaciones sería definitivo y vinculante.
Proyectos y Construcciones contrató a la firma de inspección Inspectorate, pero solo hizo análisis de cantidad y no de calidad, según admitió a ABC el propietario de la empresa verificadora. Eso demuestra que la exproveedora de INC no tenía el menor interés en demostrar el tipo de combustible que estaba entregando, sino al contrario, lo ocultaba.
Pese a todos estos antecedentes, el procurador Pedro Valiente Lara se expidió sobre el caso diciendo que tanto la INC como Proyectos y Construcciones incumplieron el contrato, pero para evitar que se acumulen multas por mora, la estatal debe pagar los US$ 2,4 millones que se le reclama.
Según indicó el titular de INC, Carlos Krüssel, pedirá a la PGR una reconsideración o bien, se puede llevar el caso a instancias judiciales.
Fueloíl fuera de rango
Según los certificados de cantidad emitidos por la verificadora Inspectorate, contratada por Proyectos y Construcciones, habrían proveído unos 61.924,346 metros cúbicos de fueloíl.
Pero de esa cantidad, 7.000 metros cúbicos fueron comprados, en realidad, de la firma Petrobras y no de la exproveedora, según comprobó ABC. Asimismo, 324,802 metros cúbicos fueron entregados en el puerto de Villa Elisa y no en Vallemí, con lo que la provisión real alcanzaría solo 54.599,544 metros cúbicos. Otra cuestión a tener en cuenta es que 22.070,454 metros cúbicos estuvieron fuera de rango, con densidad superior a los 0,98 establecidos, según comprobó la misma INC.