En Pozo Hondo, piden ayuda

Casi todos los caminos de acceso a Pozo Hondo están cortados y los “macateros” no pueden llegar, por lo que en los próximos días podría faltar aprovisionamiento de productos básicos, incluidos alimentos, dijo ayer a nuestro diario, vía telefónica, el presidente de la Comisión Vecinal de dicha localidad del Chaco, Alberto Jaime, al evaluar la situación que se presenta en la zona tras las copiosas lluvias caídas y el nuevo repunte del caudal del río Pilcomayo.

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En Pozo Hondo (PAR)- Misión La Paz (ARG) las aguas del río alcanzaron de nuevo una altura de 6,70 metros en la noche del viernes, y hubo desbordes en varios sectores de la ribera argentina y también hacia el lado paraguayo, principalmente hacia Pedro P. Peña y aguas abajo. El Pilcomayo había registrado una marca histórica a principios de febrero pasado, con 7,31 metros en la misma zona 

De todas formas, esta vez las dificultades no provienen directamente del Pilcomayo sino de las lluvias muy abundantes que han caído en las últimas semanas y que han cortado prácticamente todos los caminos, impidiendo la llegada de provistas, contó Jaime, agregando que una de las pocas salidas que tienen es por Picada 500. En cuanto a las lluvias, recordó que desde el 8 de diciembre y hasta ahora se llevan contabilizados un total de casi 850 milímetros.

“Por eso, antes de que la situación sea más grave, pedimos que vuelva la gente de la SEN (Secretaría de Emergencia Nacional), para poder ayudar con alimentos a la gente que necesite, además de la parte de asistencia médica”, manifestó Jaime.

Relató que estas últimas semanas de creciente han tenido dos fallecidos, uno de ellos pariente suyo, Bernardo Jaime, quien al parecer fue afectado por una mordedura de serpiente, y fue llevado a un hospital de la localidad de Tartagal, Salta (Argentina), desde donde luego se informó de su deceso. También perdió la vida un adolescente de la parcialidad guaraní, de la comunidad de “La Laguna”, que tuvo inicialmente mucho dolor de cabeza, pero cuyo diagnóstico final no se tiene, dijo la fuente.

Añadió que en Pozo Hondo hace mucho tiempo que sueñan con tener un puesto sanitario, pues el médico más cercano está en Pedro P. Peña, a unos 50 kilómetros, lo que a veces ya les resulta inalcanzable cuando el paciente está grave o los caminos están cortados.

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