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El empresario es partidario de que se genere el proyecto de ley que ordene los cargos de confianza, una medida que debe hacerse ya independientemente del momento político o signos de los que gobiernan.
A su criterio existen dos caminos: uno, que se presente al Congreso el proyecto de ley para que de aquí al futuro los cargos de confianza duren el tiempo del periodo de gobierno de turno, algo similar a lo que se tiene actualmente en la legislación de Chile.
Dos, como la ley no tiene efectos retroactivos se debe hacer que aquellos funcionarios que tienen una alta capacitación y están en condiciones de desempeñarse efectivamente en algún cargo, que tengan funciones para evitar que sigan cobrando por no realizar nada.
Sostuvo que en este caso legalmente el Estado no ha podido desprenderse de aquellos que llegaron a los cargos de confianza, ya que muchos lograron su reposición a través de la Justicia y terminaron cobrando sumas millonarias.
Macchi indicó que conoce a varios técnicos que están en condiciones de desempeñarse en algún cargo y que es un desperdicio que estén en el freezer (área donde van a parar los que quedan sin cargos tras un cambio de gobierno) o sin funciones.
El titular de la Cámara de Comercio dijo que el problema viene desde el inicio de la democracia y se fue agravando con el tiempo y distorsionando todo, porque este número de funcionarios no solo demandan muchos recursos del Estado en materia salarial, sino también en espacio, teléfono, luz y otros servicios.
De acuerdo con un informe del Poder Ejecutivo publicado, existen unos 2.000 funcionarios que no desempeñan tarea alguna o están en el freezer, en toda la administración pública.
Estos datos surgen como resultado de un relevamiento de datos que había efectuado el Ejecutivo en las instituciones públicas para determinar cuántos planilleros existen y que debía haber informado a la opinión pública, lo que nunca sucedió.
Estos funcionarios tienen estabilidad laboral y alguna vez ocuparon cargos de confianza, sin embargo tras los sucesivos cambios de gobiernos quedaron sin funciones, pero perciben sus salarios normalmente.