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La recientemente reconstituida AMP tiene identificado al contrabando como una de las mayores dificultades del sector. Ya no es la llegada de los “súper” lo que les preocupa por la reducción de las ventas, sino más bien el ingreso ilegal de mercaderías.
Si bien no se puede dar una cifra exacta, explicó Lezcano, los miembros de la asociación perciben una merma en la actividad comercial, sobre todo en los rubros de jabón de tocador, jabón en polvo y líquido para lavarropas, y también de la cerveza.
Los productos de Argentina que entran sin pagar impuesto se venden a mitad de precio y compiten deslealmente con los importados y con los sustitutos de origen nacional.
La oferta de estas mercaderías no se da solo en las esquinas y avenidas de Asunción y Gran Asunción, al lado de semáforos, sino que llegó también a los barrios. “Nos afecta verdaderamente esa gente que se instala con su mesita y vende los productos, porque se ubica cerca de las despensas”, indicó.
Por eso, en la AMP están conversando con los proveedores para establecer políticas de acción para combatir el flagelo.