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En el marco del control de calidad y cantidad que viene desarrollando el órgano oficial de control, tanto a las estaciones de servicios como a las distribuidoras mayoristas, la semana pasada tomó muestras para su posterior análisis de calidad, cuyos resultados fueron dados a conocer ayer. El director del INTN, Luis Morínigo, indicó que en el gasoíl Tipo I (especial o prémium, con nombre comercial “Mbarete) dio como resultado en los exámenes laboratoriales que este combustible se comercializa fuera del rango permitido por las normas.
Citó que el gasoíl especial o prémium, que debería tener hasta un máximo de 500 partículas de azufre por millón (ppm), arrojó 696 ppm, es decir, casi 200 ppm más de lo permitido por las normas.
Este gasoíl especial se encuentra en el segmento del diésel de mayor precio en el mercado, justamente porque está destinado a los vehículos movidos a inyección electrónica, que no pueden moverse con el gasoíl común, importado mayormente por la estatal, en alrededor del 80% del mercado. Morínigo aclaró que en este gasoíl no hallaron anomalías. Por su parte, el presidente de Petropar, Sergio Escobar, descalificó este resultado laboratorial y habló de “persecución política de oviedistas”. Cuando se le requirió ayer en una radioemisora que los cuestionamientos no son solo de INTN sino de la prensa, Contraloría y fiscalía, que investiga un caso del gasoíl común cancerígeno, respondió que todos “son oviedistas”.