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Cabrera fue destituido como funcionario del INTN tras el sumario administrativo que se había iniciado por abandono de cargo.
Luego de que en setiembre de 2016 fue reemplazado como director del INTN, dejó de asistir a su lugar de trabajo. Poseía 20 años de antigüedad en la institución.
El funcionario destituido aún puede apelar la medida en lo contencioso-administrativo, donde otra vez debe ser estudiado su caso, según manifestaron informantes de la institución.
Mientras no aparecía en el INTN ejercía el cargo de decano en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (UNA).
Denuncias
Sin embargo, pesan sobre él varias denuncias de graves hechos de corrupción, algunos casos incluso están vigentes ante el Ministerio Público.
En efecto, Ever Cabrera y un exfuncionario del ente, Robert Duarte, fueron denunciados ante la fiscalía por los presuntos hechos punibles de “lesión de confianza” y “cobro indebido de honorarios” cuando el extitular del INTN fungía a la vez de profesor en la Fiuna en horarios de oficina.
También existen denuncias por licitaciones amañadas y dirigidas para beneficiar a ciertas empresas “amigas” con adjudicaciones multimillonarias. En tal sentido, se menciona a la firma Piro’y SA (Grupo Luminotecnia) que fue beneficiado con millonarias licitaciones por parte del INTN cuando Cabrera era director y el ingeniero Robert Duarte funcionario permanente del instituto y a la vez ejecutivo de la referida firma privada, violando la Ley 1626/00 de la Función Pública.
Llamativamente Piro’y SA tuvo entonces un salto significativo en la adjudicación de contratos del INTN, pasando de G. 18 millones en 2012 a más de G. 3.000 millones para 2014, coincidentemente con el ingreso de Duarte a la empresa privada.
En la resolución se insta a pagar los haberes pendientes al funcionario destituido para terminar así todo vínculo con el mismo. Además la decisión de la institución será informada a la Secretaría de la Función Pública.
Problemas en la UNA
Desde que Cabrera asumió el cargo de decano en Ingeniería UNA los estudiantes iniciaron una protesta para pedir su renuncia, atendiendo las denuncias de corrupción y nepotismo existentes en su contra.
Cabrera supo ubicar a sus dos hermanos, una hermana y su esposa en la facultad, quienes en conjunto perciben del erario público casi G. 700 millones al año.
Los estudiantes, para endurecer la medida, desde el 5 de agosto pasado ya no entraron a las aulas.
Tras la intervención de la casa de estudios por parte de Ricardo Garay, quien abrió sumario contra el decano Cabrera y ordenó su alejamiento de la facultad mientras dure el proceso en su contra, que deberá concluir en el mes de febrero que hoy inicia, los universitarios resolvieron el pasado 19 de enero levantar la medida de fuerza y retornar a clases tras cuatro meses de protesta.