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EUGENIO A. GARAY (Pablo Gastón Ortiz, corresponsal). Se trata de los miembros del comité de horticultores Jardín del Ybytyruzú de esta localidad, que recibirán fondos estatales de entre G. 36 y G. 66 millones cada uno, para financiar infraestructura como sistemas de regadíos, invernaderos, pozos, etc. Según aseguraron, desde la oficina local de la Deag se les presionaba para firmar contrato con la empresa Maxsa SA. Sin embargo, se trata de recursos que entrega el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) a los labriegos, a través del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH), provenientes de la colocación de los bonos soberanos.
Explicaron los productores que ellos desconfían de la firma Maxsa, ya que identifican al presidente de la misma, el ingeniero agrónomo Freddy Javier Martínez Alfaro, como familiar del gobernador Rodolfo Friedmann Alfaro. Más aún teniendo en cuenta las presiones que dijeron recibir.
De acuerdo con lo relatado, estos agricultores vienen trabajando en la producción de tomate en invernaderos con la consultora de Coronel Oviedo “Agro Sol”, propiedad de Ronald Benítez. Al igual que Maxsa SA, la empresa de referencia está habilitada para desarrollar proyectos de infraestructura con los fondos entregados por el MAG. Por ese motivo, los beneficiarios no ven la necesidad de contratar a otra firma.
Delia Ferreira, de la Deag local, desmintió que hayan presionado a los productores y agregó que solo les “recomendaron” que trabajen con Maxsa, ya que es en la que confían para realizar “obras de calidad”, según argumentó. Se defendió de la acusación asegurando que la idea es que “preferentemente se pueda dar el trabajo a una firma local”.
Sin embargo, Maxsa SA tiene su sede principal en Ciudad del Este y cuenta con una sucursal en Coronel Oviedo, no así en Eugenio A. Garay. El presidente de la firma reconoció que tiene una relación de parentesco con el gobernador del Guairá, pero explicó que “es muy lejana”.
De todas maneras, hubo otros agricultores de Villarrica que contrataron a esta empresa, para realizar los trabajos de infraestructura.
Los productores de tomate forman parte de los beneficiarios del proyecto encarado por el MAG de créditos “70/30”, que contempla la distribución de US$ 50 millones provenientes de los bonos soberanos.
El 70% del dinero destinado a la inversión en infraestructura será entregada en forma de subsidio, y el 30% restante como un crédito blando, a 10% de interés y un plazo de hasta siete años. Los desembolsos se iniciaron esta semana, tras la visita del ministro de Agricultura, Jorge Gattini, a la ciudad de Villarrica.