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Dirigentes de los movimientos Morecu y Solidaridad formaron una alianza y dicen ser la opción para renovar la entidad y recuperar su espíritu cooperativista.
Con la misma gente que ya lleva por lo menos 18 años en el mando de la CU no vamos a cambiar nada, "la cooperativa va a seguir siendo una especie de financiera a cargo de unos aprovechadores", coincidieron en señalar a nuestro diario dirigentes de la Alianza Universitaria, un nuevo sector conformado con los movimientos Morecu y Solidaridad con vistas a la asamblea del 25 de febrero próximo.
Ni los Cruz Roa Jorge, Carlos y César, aunque ahora estén divididos, ni algunos de sus ex aliados que formaron otros sectores, pueden ofrecer la transparencia que se necesita hoy ni devolver a la CU los principios cooperativos que han despreciado, afirmaron los "aliancistas", entre ellos, Juan Vera, Christian Roig, Alfieri Orrego Bresanovich, Rossana Núñez Balmaceda y Enrico Sachero.
La Cooperativa es fuerte en patrimonio y maneja fondos multimillonarios, pero tiene un gran déficit en cuanto a la administración transparente y efectiva del dinero y los bienes, que unos pocos vienen dilapidando para favorecerse unos a otros, dijo Vera, mientras que Daniel Rodríguez sostuvo que hoy la CU es "poderosa financieramente, pero débil en las cuestiones de solidaridad y apoyo al socio".
Se calcula que la entidad maneja lo equivalente a unos US$ 350 millones, y con un poder de compra que sea quizá solo el 10% de esa cifra, no es difícil imaginarse los negociados que se pueden montar anualmente alrededor de eso si no hay suficiente transparencia, pero sí "desprolijidades" de la directiva, agregó Rodríguez.
Estos opositores a los Cruz Roa lamentaron que el actual sector dominante de la CU "se haya beneficiado directamente del poder", porque actúan como los dueños de la entidad y "hacen lo que quieren con el dinero de todos", a lo que se suma un nepotismo casi generalizado.
Por su parte, Ninfa Benítez Sosa expuso que ellos quieren convertirse en una alternativa en la asamblea frente a una élite que ha hecho mucho dinero en la CU, lo que indica que la "riqueza" de la mayor cooperativa del país no se expande hacia todos los socios, sino a unos pocos.
Orrego Bresanovich indicó, a su vez, que los socios precisan mejores servicios, no tanto de excedentes, sino de buenos servicios, comenzando por el sistema crediticio que en la actualidad tiene según él tasas casi usurarias para el nivel cooperativo, equiparables a bancos y financieras, e incluso con más burocracia y más tiempo de gestión.
"Dicen que el año 2011 va a dejar excedentes de aproximadamente G. 25.000 millones, pero no podemos alegrarnos por eso si tenemos cuentas incobrables por un monto tres veces mayor", añadió el dirigente.
En cuanto a los negociados, Alianza Universitaria dice prometer que sus miembros, si logran acceder a los cargos electivos, impulsarán "acciones administrativas y judiciales que permitan la investigación, sanción y castigo de los responsables de posibles delitos contra los valores cooperativos y el patrimonio de la CU".
Además, entre otras cosas, trabajarán por la recuperación de la Cooperativa "como una entidad de carácter social y solidario a favor de los socios, y no de las élites".
Oficialistas ex "Raíces"
En principio, hace más de una década, el movimiento de los Cruz Roa se llamaba simplemente "Raíces", y luego pasó a llamarse "Raíces Hapoite", hasta que el 2 de abril de 2011 hubo un enfrentamiento entre los hermanos Carlos y Jorge Cruz Roa que se llevó a unas elecciones internas, ganando el segundo, quien adoptó el nombre de "Hapoite Teete" para su grupo. Para esta asamblea, "Raíces Hapoite" ni aparece y tampoco su principal dirigente, Carlos Cruz Roa. Ese sector se convirtió en "UC-Unión para el Cambio" y su lista es encabezada por Luis H. Berganza y Germán Latorre. Otro sector escindido de este grupo es MOREI (Movimiento de Recuperación Institucional), de Lourdes Ortellado.
Con la misma gente que ya lleva por lo menos 18 años en el mando de la CU no vamos a cambiar nada, "la cooperativa va a seguir siendo una especie de financiera a cargo de unos aprovechadores", coincidieron en señalar a nuestro diario dirigentes de la Alianza Universitaria, un nuevo sector conformado con los movimientos Morecu y Solidaridad con vistas a la asamblea del 25 de febrero próximo.
Ni los Cruz Roa Jorge, Carlos y César, aunque ahora estén divididos, ni algunos de sus ex aliados que formaron otros sectores, pueden ofrecer la transparencia que se necesita hoy ni devolver a la CU los principios cooperativos que han despreciado, afirmaron los "aliancistas", entre ellos, Juan Vera, Christian Roig, Alfieri Orrego Bresanovich, Rossana Núñez Balmaceda y Enrico Sachero.
La Cooperativa es fuerte en patrimonio y maneja fondos multimillonarios, pero tiene un gran déficit en cuanto a la administración transparente y efectiva del dinero y los bienes, que unos pocos vienen dilapidando para favorecerse unos a otros, dijo Vera, mientras que Daniel Rodríguez sostuvo que hoy la CU es "poderosa financieramente, pero débil en las cuestiones de solidaridad y apoyo al socio".
Se calcula que la entidad maneja lo equivalente a unos US$ 350 millones, y con un poder de compra que sea quizá solo el 10% de esa cifra, no es difícil imaginarse los negociados que se pueden montar anualmente alrededor de eso si no hay suficiente transparencia, pero sí "desprolijidades" de la directiva, agregó Rodríguez.
Estos opositores a los Cruz Roa lamentaron que el actual sector dominante de la CU "se haya beneficiado directamente del poder", porque actúan como los dueños de la entidad y "hacen lo que quieren con el dinero de todos", a lo que se suma un nepotismo casi generalizado.
Por su parte, Ninfa Benítez Sosa expuso que ellos quieren convertirse en una alternativa en la asamblea frente a una élite que ha hecho mucho dinero en la CU, lo que indica que la "riqueza" de la mayor cooperativa del país no se expande hacia todos los socios, sino a unos pocos.
Orrego Bresanovich indicó, a su vez, que los socios precisan mejores servicios, no tanto de excedentes, sino de buenos servicios, comenzando por el sistema crediticio que en la actualidad tiene según él tasas casi usurarias para el nivel cooperativo, equiparables a bancos y financieras, e incluso con más burocracia y más tiempo de gestión.
"Dicen que el año 2011 va a dejar excedentes de aproximadamente G. 25.000 millones, pero no podemos alegrarnos por eso si tenemos cuentas incobrables por un monto tres veces mayor", añadió el dirigente.
En cuanto a los negociados, Alianza Universitaria dice prometer que sus miembros, si logran acceder a los cargos electivos, impulsarán "acciones administrativas y judiciales que permitan la investigación, sanción y castigo de los responsables de posibles delitos contra los valores cooperativos y el patrimonio de la CU".
Además, entre otras cosas, trabajarán por la recuperación de la Cooperativa "como una entidad de carácter social y solidario a favor de los socios, y no de las élites".
Oficialistas ex "Raíces"
En principio, hace más de una década, el movimiento de los Cruz Roa se llamaba simplemente "Raíces", y luego pasó a llamarse "Raíces Hapoite", hasta que el 2 de abril de 2011 hubo un enfrentamiento entre los hermanos Carlos y Jorge Cruz Roa que se llevó a unas elecciones internas, ganando el segundo, quien adoptó el nombre de "Hapoite Teete" para su grupo. Para esta asamblea, "Raíces Hapoite" ni aparece y tampoco su principal dirigente, Carlos Cruz Roa. Ese sector se convirtió en "UC-Unión para el Cambio" y su lista es encabezada por Luis H. Berganza y Germán Latorre. Otro sector escindido de este grupo es MOREI (Movimiento de Recuperación Institucional), de Lourdes Ortellado.