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La ley de referencia modifica y amplía la Nº 1302/98, que reglamenta las modalidades y condiciones especiales complementarias de la Nº 1045/83, que establece el régimen de obras públicas” y APP (alianza público-privada).
Quejas de los constructores locales
El referido encuentro entre el ministro de Hacienda y los constructores se llevó a cabo el jueves último en el local de la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco), y en la oportunidad las empresas constructoras expusieron los problemas que aquejan al sector, que están relacionados principalmente a las obras públicas.
Resaltaron que la situación actual es todavía más crítica para las medianas y pequeñas empresas, la mayoría de las cuales no están trabajando.
Preferir a empresas nacionales
Plantearon igualmente a Peña que en las obras financiadas con los recursos provenientes de la colocación de los bonos soberanos tengan preferencia las empresas nacionales, una práctica común en los países vecinos y en la región, según dijeron.
Fonacide y Senavitat
También le plantearon que algunas instituciones, como el caso de Fonacide (Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo), creada por ley Nº 4758/12, dispone de más de US$ 75 millones para la reconstrucción y reparación de escuelas, pero que ese monto no se ejecuta.
Se quejaron igualmente de la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat), que dispone de US$ 100 millones, pero que tampoco los ejecuta. Enfatizaron que estas y otras instituciones del Estado deberían convertirse en fuentes generadoras de trabajo en el interior del país.
Otro empresario presente en la sesión de referencia apuntó el atraso en que incurren la mayoría de las instituciones públicas a la hora de pagar los certificados de obra y que esa práctica dificulta el cumplimiento de los cronogramas de trabajo e incide en los costos improductivos de las contratistas.
A su turno, el ministro de Hacienda reconoció la importancia de la industria de la construcción para la economía nacional, así como para la captación de mano de obra. Asimismo, les recomendó que transparenten sus balances para acceder a créditos más ventajosos. Admitió que este gobierno es el que más endeudó al Estado, pero que en la misma medida es el que más invirtió en obras públicas.
Reforzó su posición con el argumento de que nuestro país, históricamente, es el que tiene menor desarrollo en infraestructura en la región y que es impostergable desarrollar corredores que faciliten la exportación.
Reconoció que las tasas locales de interés son elevadas, pero que gracias el incremento sostenido de la actividad es muy posible que las intermediarias “aterricen”, como ya ocurrió en algunos países vecinos de la región.