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Durante una conferencia que tuvo lugar en el Granados Park Hotel, denominada "El desarrollo socioeconómico de Corea y su aplicación en el Paraguay", Choi agregó que su país, después de la implementación del primer plan quinquenal (1996), se convirtió en la undécima potencia económica mundial, siendo el principal constructor de barcos, fabricante de aparatos electrónicos, automóviles y, además, el mayor productor de acero.
El ingreso per cápita de los coreanos, luego de haber estado por debajo de los US$ 100 dólares anuales, actualmente es US$ 10.000.
Según Choi, la fórmula utilizada por Corea para conducir el desarrollo económico fue solicitar préstamos a las instituciones financieras internacionales. El dinero alcanzado fue prestado a las empresas coreanas, asignando el monto, porcentaje de interés, inclusive, los campos en los cuales las firmas tenían que invertir. El gobierno insistió en que las empresas coreanas crecieran en la mayor brevedad posible en el ámbito internacional y que pudieran tener renombre mundial.
Por otro lado, Choi explicó que el gobierno creaba e instalaba los complejos industriales y era el responsable de toda la infraestructura (electricidad, agua, calles). Así se formaron 30 grandes empresas (conglomerados, chaebol en coreano). Fueron reclutadas las élites de la sociedad para integrar el plantel de funcionarios públicos, que elaboraron y llevaron adelante el plan de desarrollo además de controlar los bancos.
Destacó además que el gobierno coreano exigió una política austera, dando mucho énfasis a la educación, tanto para abastecer las fuerzas laborales de buena calidad como para crear una clase media educada que actualmente es el soporte y principal factor que logró el establecimiento de la democracia. El pueblo entero se unió en un solo objetivo que es "vivir mejor" y se sacrificaba para alcanzar esta meta guardando las demandas individuales -lujos- para el bien de la sociedad y la nación, añadió.
El desarrollo de Corea el Sur es uno de los fenómenos más sorprendentes y significativos del mundo actual -desde 1961-, en cuyo proceso el Estado ha tenido una marcada gravitación, hasta reducir progresivamente su participación a comienzos de la década de los ochenta.
El ingreso per cápita de los coreanos, luego de haber estado por debajo de los US$ 100 dólares anuales, actualmente es US$ 10.000.
Según Choi, la fórmula utilizada por Corea para conducir el desarrollo económico fue solicitar préstamos a las instituciones financieras internacionales. El dinero alcanzado fue prestado a las empresas coreanas, asignando el monto, porcentaje de interés, inclusive, los campos en los cuales las firmas tenían que invertir. El gobierno insistió en que las empresas coreanas crecieran en la mayor brevedad posible en el ámbito internacional y que pudieran tener renombre mundial.
Por otro lado, Choi explicó que el gobierno creaba e instalaba los complejos industriales y era el responsable de toda la infraestructura (electricidad, agua, calles). Así se formaron 30 grandes empresas (conglomerados, chaebol en coreano). Fueron reclutadas las élites de la sociedad para integrar el plantel de funcionarios públicos, que elaboraron y llevaron adelante el plan de desarrollo además de controlar los bancos.
Destacó además que el gobierno coreano exigió una política austera, dando mucho énfasis a la educación, tanto para abastecer las fuerzas laborales de buena calidad como para crear una clase media educada que actualmente es el soporte y principal factor que logró el establecimiento de la democracia. El pueblo entero se unió en un solo objetivo que es "vivir mejor" y se sacrificaba para alcanzar esta meta guardando las demandas individuales -lujos- para el bien de la sociedad y la nación, añadió.
El desarrollo de Corea el Sur es uno de los fenómenos más sorprendentes y significativos del mundo actual -desde 1961-, en cuyo proceso el Estado ha tenido una marcada gravitación, hasta reducir progresivamente su participación a comienzos de la década de los ochenta.