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SANTA ROSA DE LIMA, Misiones (Roberto González A., Javier Sánchez, Jorge Cañete y Rafael Rodríguez, enviados especiales). “Las obras van a comenzar independientemente de lo que se tenga que hacer en el Parlamento, porque, repito, no es vinculante (la aprobación de las notas reversales) con la maquinización del Aña Cua”, expresó tajante Recalde, al ser consultado por periodistas tras el acto de inauguración y de entrega de aportes del Gobierno, en que estuvo el presidente Horacio Cartes, en este distrito del octavo departamento.
El director paraguayo de la EBY reconoció que el Gobierno cambió la postura de exigir primero el arreglo de la deuda de la central energética para maquinizar Aña Cua. “Sí, en su oportunidad se había condicionado por parte del Gobierno paraguayo de que se haga el arreglo de la deuda. Bueno, ese es un arreglo hecho ya”, señaló Recalde, en alusión al acuerdo firmado el 4 de mayo último por Cartes y el presidente argentino, Mauricio Macri, sobre la deuda de la EBY. Las notas reversales que contienen las nuevas condiciones acordadas están siendo ajustadas actualmente por las cancillerías de nuestro país y de la Argentina para ser remitidas a consideración de los respectivos parlamentos.
Recalde argumentó además que el Gobierno no puede depender del criterio de los políticos para encarar las obras de Aña Cua y aseguró que en el tratado “no tiene escrito en ninguna parte que no podemos hacer las obras” y destacó que en el Anexo B del mismo documento está contemplada la posibilidad.
De este modo, se contradice lo expresado al inicio de las negociaciones por el ministro Juan Carlos López Moreira, quien aseguró que no pondrían un ladrillo más en Yacyretá mientras no se clarifiquen las cuentas.
El director de la hidroeléctrica estimó que la maquinización de Aña Cua tendrá un costo entre US$ 480 millones y 600 millones, “dependiendo de las ofertas” en las licitaciones, y que se hará en aproximadamente cuatro años. Destacó que generará entre 1.000 a 1.200 puestos laborales y que conjuntamente con la ampliación de la casa de máquinas, de 20 a 23 turbinas, se emplearán a unas 3.000 personas. La licitación de esta obra se hará en alrededor de un año, agregó Recalde.