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El director Administrativo de la Municipalidad de San Antonio, Inocencio Mendoza, confirmó que ayer a primera hora, un equipo de la Comuna verificó el sitio, ubicado a pocas cuadras de la sede municipal. Técnicos del departamento de Salubridad y del departamento de Obras constataron varias irregularidades en el predio, especialmente en lo que tiene que ver con la disposición de los desechos, comentó.
Sin embargo, pese a las evidentes faltas, el proceso que posiblemente derivaría en la clausura del lugar, recién empieza. El informe de la Municipalidad de San Antonio se elevará al Juzgado de Faltas, instancia que determinará las sanciones, explicó Mendoza. El Ministerio de Trabajo también “reaccionó”
Pese a que se señalaron desde el principio las precarias condiciones laborales y el trabajo peligroso, recién ayer los fiscalizadores del Ministerio de Trabajo inspeccionaron el lugar.
De acuerdo al informe de la intervención, se encontraron múltiples falencias. Los empleados no contaban con la indumentaria adecuada: ninguno tenía mascarillas y algunos no tenían calzados protectores.
A través de entrevistas a los empleados, pudieron enterarse de que en el lugar se trabaja de 7:30 a 20:00, de lunes a viernes, por sueldo mínimo. Tampoco se cuenta con seguro social.
Los fiscalizadores solicitaron que los encargados se presenten en la sede del ministerio para entregar los documentos obligatorios.
También la Secretaría del Ambiente (Seam) realizó el martes otra intervención, en la cual constató el incumplimiento del plan de gestión ambiental en relación con la planta de tratamiento de efluentes, y al manejo inadecuado de residuos.
El dueño, Gustavo Pérez Codas, continúa prófugo. El hombre está imputado por homicidio culposo y exposición de personas a lugares de trabajo peligroso. El lunes por la tarde, los trabajadores Carlos Giménez Ayala y Hugo Gómez fallecieron en el sitio al caer en tanques llenos de materiales químicos.