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PEDRO JUAN CABALLERO (Cándido Figueredo Ruiz, de nuestra redacción regional). El comercio fronterizo en esta parte del país está enfrentando una de sus peores crisis de los últimos diez años, según sostiene la Cámara de Comercio de esta ciudad, pues con la implementación de los free shops en el lado brasileño (tiendas libres de impuestos), estos pasarán a tener ventajas con las que los comercios paraguayos difícilmente puedan competir.
El presidente de la Cámara de Comercio, Alejandro Benítez Araña, y Tomas Medina, miembro de dicha cámara, coinciden en señalar que con la puesta en marcha de los free shops en el lado brasileño empeorará aún más la ya crítica situación. Por eso, plantean que también se implemente en nuestro país ese tipo de tiendas, pues incluso Argentina llegó a hacer lo mismo en Puerto Iguazú, lo cual restó numerosos compradores a la fronteriza Ciudad del Este de Paraguay.
“Sabemos que los turistas brasileños vienen al Paraguay en busca de mejores precios y productos con menores aranceles que en su país. Todos los productos que estamos ofertando existen en el Brasil, pero ellos vienen porque tenemos mejores precios”, explicó Medina.
Benítez Araña, por su parte, indicó que “la situación apunta a que ahora va a ser más barato para todos los compradores hacer sus compras en el lado brasileño, ya que difícilmente vamos a poder competir con ellos”.
Ante esta situación, según sostienen ambos representantes de los comerciantes en esta frontera, lo que se pretende como solución al problema es exigir a las autoridades paraguayas la implementación de ese mismo tipo de free shops en las ciudades fronterizas con Brasil. Ese es el único instrumento económico que tienen a la vista para dar la posibilidad a los comerciantes de bajar sus precios y poder competir con sus pares de las ciudades del país vecino.
De acuerdo con lo añadido, las tiendas libres de impuestos tanto en el Brasil como en Argentina no requieren los registros sanitarios de los alimentos, mientras que los comercios paraguayos deben cumplir con una burocrática lista de requisitos. “Para el importador es extremadamente complicado importar bebidas, alimentos y productos para la salud, eso incluye champú, perfumes, maquillajes, chocolates y todo tipo de bebidas”, comentaron en referencia a las “barreras no arancelarias” que enfrentan.
El plan de los pedrojuaninos es reunirse en breve con las cámaras de comercio de otras ciudades fronterizas, a fin de buscar consenso y luego pedir una reunión urgente con las autoridades nacionales para discutir el tema que les aqueja.